sábado, 9 de febrero de 2013

Lo ha querido arreglar y quizá lo ha líado más



Rajoy, los ingresos de un pobre presidente

Mariano Rajoy ha publicado por fin sus declaraciones de la Renta -que anunció hace una semana como muestra de transparencia a raíz del caso Bárcenas-, aunque solo desde que dejó su puesto en el Gobierno de Aznar (2003). Varias cosas llaman la atención:
1) Sus datos fiscales no coinciden con los que presentó el Congreso. “En ese documento, Rajoy declara haber recibido 98.225 euros del Partido Popular en concepto de dietas y gastos de representación. Sin embargo, en la declaración publicada en la web de Moncloa la cifra es mucho más alta: 181.098 euros. La diferencia entre ambas cifras es de 82.873 euros que Rajoy percibía del PP y de los que nada dijo al Congreso de los Diputados”, escribe Gonzalo Cortizo en eldiario.es
2) Rajoy cobró tres sueldos en 2004 y 2005. Del PP, del Congreso y del Gobierno.
3) Se practica una espectacular subida del 30%  en plena crisis. 30.000 euros más. “En 2009, ya en plena crisis y después de perder sus segundas elecciones, Rajoy recibe un nuevo aumento fuerte del sueldo del PP, de 186.000 a 196.000. En ese año la necesidad de contener los sueldos era uno de los ejes de su discurso y el de la patronal. Ese año Rajoy cobró en total 240.000 euros”, detalla Carlos E Cue en El País.
4) Pasó de cobrar 240.000 euros en la oposición a unos 75.000 en el Gobierno, que prohíbe otras actividades al margen.  Es el dato que destaca la prensa afín. Y los 840.131 que pagó en diez años a Hacienda.
5) Como era de esperar, no figura en el IRPF ningún pago en “B”.
Rajoy dijo que él sabía ganarse la vida, que no necesitaba la política. Si su sueldo de Registrador -que sigue sin responder si percibe- era superior, realmente es un pobre presidente. Lo es, por esa mezcla de mentira, chapuza e incompetencia de sus cuentas, al menos de sus declaraciones de ingresos. No nos lo merecemos.
Añadamos que en el dinero que maneja el PP para su funcionamiento -publicado también- se basa en un 90% en subvenciones públicas y con sustanciales aumentos. Llama la atención en un partido neoliberal cuyo lema es adelgazar el Estado y que lo ha llevado a la práctica en detrimento de nuestros derechos, al practicar duros recortes a la sanidad, educación públicas.

Mientras los ciudadanos españoles veían caer sus sueldos

Rajoy duplicó sus ingresos entre 2003 y 2009

  Gonzalo Cortizo / Belén Carreño
La mayor subida de sueldo de Rajoy se produce en 2008. Cospedal ya estaba al frente del partido y Bárcenas con un pie fuera de la organización. Ese año el incremento de nóminas en Génova 13 fue generalizado.
En el ejercicio 2006 Rajoy dejó de cobrar un complemento del Ministerio de la Presidencia que bajó sus ingresos totales a 187.320 euros. Las subidas salariales a cargo del partido absorbieron en los siguientes años esta pérdida.
Los ingresos de Mariano Rajoy, según los datos fiscales que ha publicado La Moncloa
Los ingresos de Mariano Rajoy, según los datos fiscales que ha publicado La Moncloa

Mariano Rajoy es afortunado en materia laboral. A pesar de la crisis, el presidente del Gobierno, se subió el sueldo que cobraba del PP en algunos años en los que la crisis económica obligaba a muchos españoles a negociar sus sueldos a la baja. Así lo señalan los datos fiscales publicados este sábado en la web de Moncloa. Según esta información, 2008 fue un año clave en la vida laboral del presidente del Gobierno.
De un plumazo, en ese ejercicio, Rajoy se subió el sueldo que percibía del PP en casi un 18%. En 2008 cesan los apuntes contables atribuidos al extesorero Luis Bárcenas. En ese año Cospedal se hace fuerte en la lucha contra cualquier práctica de corrupción que pudiera asomar en las filas del PP. En ese año, los gastos del PP en sueldos registran un notable incremento. Rajoy fue uno de los beneficiados.
En 2010 es el único ejercicio en el que Rajoy se redujo su retribución a cargo del Partido Popular, con un tajo de casi el 8%. Este recorte, añadido a la reducción del sueldo que cobraba como diputado de la oposición, le hicieron bajar sus ingresos hasta algo más de 222.000 euros, una cifra inferior a la que ingresaba en 2004.
Y, es que, en las retribuciones totales del conservador hay unos cambios bruscos de un año para otro. Así, entre 2003, año en el que era ministro, y 2004, ejercicio en el que ya sumaba varios sueldos (el de la agrupación política, el de diputado y el del ministerio de la presidencia), se duplicaron sus ingresos.El primer año en el que deja de cobrar de Presidencia (2006) es en el que se registran los ingresos más bajos (187.000 euros) pero rápidamente las subidas en su sueldo por la agrupación política le compensan esta merma en su remuneración.
La aparición y desaparición de algunas de las remuneraciones, como las que dependian del ministerio de la Presidencia, hace que en los primeros años en la oposición los ingresos totales fluctúen con fuerza hasta volver a estabilizarse en el entorno de los 240.000 euros. De nuevo el doble de lo que cobraba cuando formaba parte del Gobierno de José María Aznar.
Si en 2004 Rajoy declara ingresos del PP de 136.870 euros, en 2011 la cifra llega hasta los 200.628 euros. Los aumentos salariales a cargo del partido de Génova son muy dispares según la documentación facilitada hoy por Moncloa. Así, en 2007 la subida en sus ingresos fue cercana al 8%. Pero el salto realmente significativo se produce en 2008, año electoral, en el que Rajoy cobra casi un 18% de las arcas del partido.
Con excepción del bache de 2010 respecto a 2009, cuando la remuneración bajó un 7,83%, el resto de los ejercicios las subidas de sueldo son considerables, hasta sobrepasar los 200.000 euros netos en 2011. Estas subidas son parcialmente compensadas por los recortes en su otro sueldo oficial, el de diputado.
En la actualidad Rajoy no percibe salario alguno diferente al del presidente del Gobierno. La ley lo impide y eso explica el descenso notable en sus retribuciones con respecto a cuando lideraba la oposición. Durante los años apuntados en las declaraciones de la renta publicadas en Moncloa, Rajoy llegó a cobrar 1.390.131 euros solo del PP. Al margen, está su salario como diputado y las percepciones que cobró como exministro y exvicepresidente del Gobierno de José María Aznar.
El incremento en las nóminas de Rajoy es coherente con la marcha económica del partido del Gobierno. Según la información que el pasado viernes se publicó en la web del partido de Rajoy, durante los años más duros de la crisis el PP tuvo más ingresos que gastos. La crisis no ha afectado a los salarios de Rajoy y tampoco a las cuentas del Partido Popular.

La agresión a Angustias filmada


Qué no nos cuenten historias y nos vengan a decir que son invenciones. Así se ensañó un gañán de 1.90 y muchos kilos con la Abuela del 15 M

Las voces del silencio en la red

La lista: Disidencia on line
 
Lino González

Ser bloguero y disidente en algunos países no es tarea fácil. He aquí una muestra de todos aquellos activistas que tienen restringidos sus derechos fundamentales.

arabia saudi    
AFP/Getty Images
 

Arabia Saudí

Eman al Nafjan: La bloguera saudí, residente en Riad, comenta desde hace cuatro años la actualidad del reino gobernado por la dinastía de Al Saud. Muchos de sus comentarios tienen que ver con las dificultades a las que se enfrentan las mujeres saudíes para ejercer y desarrollar sus derechos. Además de usar su blog, Saudiwoman, y de su cuenta en Twitter, (@Saudiwoman), Al Nafjan colabora con varios medios internacionales como The New York Times, Foreign Policy, The Guardian o World Policy Journal. Otro destacado bloguero saudí es el joven Ahmed al Omran, residente en estos momentos en EE UU, que desde su blog Saudi Jeans comenta la actualidad política y cultural de su país. Al Nafjan escribía, recientemente, sobre Arabia Saudí que: “En una monarquía absoluta, como la nuestra, la conciencia política, por no hablar de la democracia, es difícil de lograr". Añadía que la falta de tradición democrática no implica que los ciudadanos no se merezcan ni quieran un régimen de gobierno distinto al que tienen que padecer. En Arabia Saudí, la blasfemia puede llevar aparejada una pena de muerte.

Azerbaiyán

Khadija Ismayilova: hace unos meses esta periodista de investigación azerí recibió un sobre con unas fotos de naturaleza íntima junto al siguiente mensaje: «Puta, compórtate o serás difamada». Lejos de amedrentarse, Ismayilova contó este intento de chantaje en su cuenta de Facebook, añadiendo que no le había sorprendido mucho. Uno de los últimos artículos de la periodista, que lleva años denunciando la corrupción de los gobernantes azeríes, había tratado sobre los negocios del clan del presidente Ilham Aliyev. Días después de recibir la amenaza, terminó haciéndose público un vídeo sexual de Ismayilova. El origen de esas imágenes: cámaras instaladas ilegalmente en su domicilio. Esta locutora, que actualmente trabaja en la emisora que Radio Free Europe tiene en Azerbaiyán, se mantiene activa desde hace años en las redes sociales, como en la ya citada cuenta de Facebook o en la de Twitter (@Khadija0576). Las autoridades de la pequeña república ex soviética, rica en petróleo, hacen todo lo posible para silenciar a la disidencia interna. Destacan las extorsiones y las acusaciones falsas por las que algunos periodistas y activistas han llegado a cumplir penas de prisión. La compañía nórdica de telecomunicaciones TeliaSonera ha sido acusada de facilitar a las autoridades del país –y también a las de otras repúblicas ex soviéticas- el control de las comunicaciones de los ciudadanos.

Barheim

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AFP/Gettyimages
Maryam al Khawaja: Nacida en Siria hace 26 años, hija de un conocido defensor de los derechos humanos de Barheim que tuvo que exiliarse en varias ocasiones, Al Khawaja desarrolla gran parte de su actividad como activista desde el Centro de Derechos Humanos Nacida en Siria hace 26 años, hija de un conocido defensor de los derechos humanos de Barheim que tuvo que exiliarse en varias ocasiones, Al Khawaja desarrolla gran parte de su actividad como activista desde el (@MARYAMALKHAWAJA) que hasta entonces había sido limitada. A pesar del acoso creciente por parte de las autoridades al que tuvo que hacer frente conforme iba ganando notoriedad como opositora, Al Khawaja no dejó de acudir a las protestas de la oposición que se celebraron durante meses en la Plaza de la Perla, desde donde tuiteaba sus impresiones e informaba de la represión que la policía –ayudados por soldados saudíes- desencadenaban contra los manifestantes, en su mayoría chíies, marginados social y económicamente por la minoría suní que dirige el país.
Birmania

Nay Phone Latt: Coincidiendo con las protestas que tuvieron lugar en Birmania en 2007, conocidas como la Revolución azafrán, muchos activistas birmanos usaron Internet para publicitar lo que estaba ocurriendo en el país. La represión en los meses posteriores a las protestas fue brutal. Muchos activistas fueron detenidos y condenados a largas penas de prisión y otros se vieron forzados al exilio. Nay Phon Latt, bloguero y propietario por aquel entonces de varios cibercafés en Rangún, fue detenido en 2008 y condenado a una pena de 20 años, que más tarde se le redujo a 12. Al poco de ser liberado a comienzos de 2012, gracias a una amnistía del Gobierno, el joven, de 32 años, afirmó que su intención era volver a activar sus blogs –uno en birmano y otro en inglés, The City I dropped down-. Phone Latt declaró también que otro de sus proyectos era trabajar en la formación de los habitantes de las zonas rurales del país en el uso de Internet. Birmania, que cuenta con una pobre red de telecomunicaciones, es considerado uno de los países con una de las legislaciones sobre libertad de expresión en la Red menos permisivas.
  cuba        
 
AFP/Getty Images
       
Cuba

Yoani Sánchez: El último enfrentamiento de Yoani Sánchez con las autoridades del régimen cubano se produjo a comienzos de octubre 2012, cuando la bloguera fue detenida junto a otros disidentes mientras trataba de llegar a la ciudad de Bayamo para asistir al juicio contra el político español Angel Carromero, imputado por el accidente de tráfico que costó la vida a los disidentes cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero. Sánchez, detenida en compañía de su marido -el periodista Reinaldo Escobar-, denunció haber recibido coacciones por parte de las autoridades durante su arresto de treinta horas. Desde hace algunos años, la periodista se ha convertido en una de las voces disidentes más escuchadas dentro y fuera de la isla gracias a su blog Generación Y, cuyas entradas se publican, frecuentemente, en medios de varios países como el diario español El País, la revista italiana Internazionale o la francesa Courier International. Su cuenta de Twitter, @yoanisanchez, tiene algo más de 380 mil seguidores.

China

Li Chengpen: Poco conocido fuera de su país -entre otras razones, porque apenas habla inglés-, Li Chenpeng, que inició su carrera como periodista deportivo, logró notoriedad al publicar un libro en el año 2005 sobre la corrupción sistémica de la liga de fútbol chino. Su popularidad aumentó exponencialmente cuando denunció, a raíz del terremoto que se produjo en Sichuan en 2008, los defectos en la construcción de las escuelas de la zona debidos a la avaricia de los constructores y los políticos, acusaciones que también amplificaron disidentes como Ai Weiwei. Mientras que este último no puede usar las redes sociales chinas y ha de mantenerse operativo en páginas extranjeras como Twitter (hace unos meses creó una cuenta en Weibo y consiguió en menos de tres horas unos 10 mil seguidores antes de ser clausurada por las autoridades), Li Chenpeng sí que tiene una cuenta en esta red de micro-blogueros chinos con más de 6 millones de seguidores. Además, publica un blog en el que denuncia algunos de los problemas más importantes de la sociedad china, en especial casos de corrupción masiva y mal gobierno. Recientemente ha publicado una novela sobre las expropiaciones forzosas ilegales gracias a las que se han enriquecido y enriquecen los empresarios y los políticos de todo el país.

Egipto

      egipto
 
 
AFP/Gettyimages
Nawara Negm: La periodista, bloguera y activista de derechos humanos egipcia mantiene activo su blog Gabhet El Tahyees El Shaabeya desde 2006. Una de las portavoces del movimiento de protesta que abarrotó la plaza Tahrir e hija del poeta egipcio Ahmed Fouad Negm y de la periodista Safinaz Kazem, Nawara Negm cuenta con casi 390 mil seguidores en Twitter. Mujeres activistas como ella o Asmaa Mahfouz, son figuras destacadas del grupo de blogueros, algunos periodistas de profesión, nacidos en la década de los 70 y primeros de los 80 que han sabido aprovechar los espacios de libertad que ofrece Internet para movilizar a una parte signigicativa de la juventud urbana de Egipto. Hablamos de varias generaciones de egipcios que no habían conocido otro régimen que el de Mubarak y estaban deseando un cambio político. Considerando la situación política actual en Egipto, su labor para conseguir un cambio real y profundo no ha hecho más que comenzar, como demuestran las últimas manifestaciones contra el proyecto de Constitución redactado por el Gobierno de los Hermanos Musulmanes. Wael Ghonim, Hossam el-Hamalawy, Wael Abbas, Sandmoneky o Alaa Abd El Fattah son otros destacados jóvenes activistas egipcios que, al igual que sus compañeras Negm y Mahfouz, complementan su presencia en las calles con la labor de ser los portavoces políticos y sociales en la Red. Mujeres activistas como ella o Asmaa Mahfouz, son figuras destacadas del grupo de blogueros, algunos periodistas de profesión, nacidos en la década de los 70 y los primeros años de los 80 que han sabido aprovechar los espacios de libertad que ofrece Internet para movilizar a una parte significativa de la juventud urbana egipcia. Hablamos de varias generaciones que  no habían conocido otro régimen que el de Mubarak y estaban deseando un cambio político. Considerando la situación política actual en Egipto, su labor para conseguir un cambio real y profundo no ha hecho más que comenzar, como demuestran las últimas manifestaciones contra el proyecto de Constitución redactado por el Gobierno de los Hermanos Musulmanes. Wael Ghonim, Hossam el Hamalawy, Wael Abbas, Sandmoneky o  Alaa Abd el Fattah son otros destacados jóvenes activistas egipcios que, al igual que sus compañeras Negm y Mahfouz, complementan su presencia en las calles con la labor de portavoces políticos y sociales en la Red.

Etiopía

Eskinder Negar: En julio de este año un tribunal federal etíope condenó al periodista y bloguero Eskinder Negar a 18 años de cárcel en base a la ley nacional de anti terrorismo. El propio Negar había criticado en varias ocasiones la instrumentalización legal que el Gobierno hacía de la amenaza terrorista para silenciar toda voz crítica en el país. Otros 23 activistas de la oposición fueron condenados también durante 2012 a largas penas de prisión. Desde hace varios años, las autoridades etíopes, al igual que ocurre en la vecina Eritrea, han reprimido cualquier muestra de oposición relevante, incluidos los disidentes que usan Internet para expresarse. Los periodistas también son objeto de represión. Organizaciones de derechos humanos calculan que, desde 2011, en Etiopía han sido condenados a diversas penas unos 11 comunicadores, incluidos dos reporteros suecos acusados de colaborar con un grupo rebelde.

Guinea Bissau

António Aly Silva: Activo desde 2004, su blog Ditadura do Consenso es uno de los más visitados de la colonia portuguesa, que cuenta con una población de un 1 millón de personas. Las visitas al blog crecieron exponencialmente en abril de 2012, cuando Silva, como otros muchos ciudadanos guineanos, salió a la calle a manifestarse e informaron a través de Internet del golpe de Estado militar que estaba sufriendo el país. Aly Silva denunció haber sido detenido por los militares. Le golpearon y le quitaron las cámaras de fotos y el ordenador que empleaba para subir sus entradas en el blog (que cuenta con un dominio portugués .pt). Ha escrito una frase que muy bien podría aplicarse a los blogueros de esta lista y a todos los que como ellos tratan de oponerse a regímenes poco tolerantes con la libertad de expresión: “El primer paso hacia el heroísmo consiste en vencer el miedo".

Guinea Ecuatorial

Juan Tomás Ávila Laurel: En febrero de 2011, el escritor y bloguero ecuatoguineano comenzaba una huelga de hambre para denunciar el autoritarismo del régimen de Teodoro Obiang. Días después, y ante el acoso de las autoridades guineanas, viajó a España, donde aún reside, para continuar su ayuno. Ávila Laurel, de 45 años, es una de las pocas voces disidentes con las que cuenta el país africano. Desde su blog Malabo, que publica en la revista española FronteraD, ofrece continua información sobre las formas de actuar de las autoridades de la ex colonia española rica en petróleo y, extremadamente, pobre en buen gobierno y respeto a los derechos humanos.
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Irán

Hossein Derakhshan: El régimen iraní se aplica con una saña metódica a la hora de encarcerlar a los disidentes que usan Internet para manifestar sus opiniones. Derakhshan es un iraní-canadiense al que muchos consideran uno de los pioneros del uso del blog y de los podcasts para cuestionar al Gobierno teocrático. Comenzó su labor disidente contra las autoridades de Teherán cuando, mientras residía en Canadá, fue detenido en 2008 durante unas de sus visitas a Irán. Fue condenado a casi 19 años y medio de prisión en 2010. Actualmente, cumple condena en la prisión de Evin, en la parte norte de la capital. En esta prisión también están encarcelados algunos de los ciber activistas detenidos en los últimos años, como el bloguero y disidente Hossein Ronaghi-Maleki, apresado en 2009, o Mehdi Khazali, a comienzos de 2012. El pasado 30 de octubre, el blogero Sattar Beheshti fue llevado a la prisión de Evin para ser interrogado por la Fata, la ciberpolicía iraní encargada de asegurar el cumplimiento de las medidas correctivas contra los disidentes que usan Internet. Beheshti falleció unos días después de su dentención, el 3 de noviembre, mientras se encontraba bajo custodia policial.

Kuwait

Disidentes anónimos: las protestas que se han producido en los últimos meses en Kuwait son, tal vez, de las menos conocidas de la región. En los últimos meses, en el país se ha dado un fenómeno particular: algunas de las manifestaciones fueron convocadas a través de cuentas anónimas de Twitter. Los convocantes, que rogaban que en los comentarios que se tuiteaban se evitasen los nombres, consiguieron convocar a miles de personas para protestar contra la nueva ley electoral que se quería aprobar para las elecciones convocadas para el 1 de diciembre, y que terminaron siendo boicoteadas por la oposición. Los manifestantes habían conseguido que se anulasen los comicios de febrero en los que no había podido ser elegido ningún representante ni de la oposición ni de la minoría chiíe, históricamente marginada. Las protestas no cesaron tras los sufragios. A mediados de diciembre, los activistas rodearon el Parlamento, a cuyos recién elegidos parlamentarios consideran ilegítimos. A pesar de ser considerado como uno de los países más abiertos del Golfo, Kuwait ha detenido a varios opositores y ciberactivistas, y alguno de ellos ha recibido ya condenas ejemplarizantes por criticar a la monarquía en la redes sociales.

Maldivas

Ismail Rasheed, Hilath: Hilath, tal vez el bloguero más conocido del pequeño archipiélago del Océano Índico, fue asaltado en junio de 2012 frente a su casa de Male, la capital de las islas. Fue acuchillado en el cuello, pero, por suerte, no resultó afectada ninguna de sus arterias principales. Se sospecha que la agresión fue llevada a cabo por los islamistas radicales.
El bloguero, que ha tenido que abandonar el país, lleva tiempo denunciando el poder creciente de algunos miembros del Gobierno que califica de integristas religiosos wahabíes, modalidad del islam inédita hasta hace no mucho en el archipiélago. En noviembre de 2011, el Ministerio de Asuntos Islámicos ordenó bloquear el acceso al blog de Hilath desde las turísticas y soleadas islas. La prohibición continúa vigente.

Marruecos

        marruecos
       
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Mohamed Sokrat: El joven bloguero marroquí fue arrestado a finales del pasado mes de mayo. Se le acusaba de posesión de hachís y tráfico de drogas. Quince días después de su detención fue condenado a 2 años de prisión y al pago de una multa de 5 mil dírhams (unos 460 euros). Implicado desde hace años en los grupos activistas laicos que reivindicaban la secularización de Marruecos y una ampliación democrática de las libertades, Sokrat mantenía un blog en el que reclamaba medidas tan delicadas en el mundo árabe como la libertad sexual y el respeto de los derechos de las minorías sociales y religiosas. Su amigo y compañero de activismo secular, el también conocido bloguero marroquí Kacem el Ghazzali residente en Suiza –que mantiene activos dos blogs: Atheistica y Bahamut, además de una concurrida página en Facebook- ha declarado, a propósito del arresto de Sokrat, que en Marruecos no son nuevas las acusaciones fabricadas por la policía para reprimir a los disidentes y mucho menos desde la subida al poder hace unos meses del Partido para la Justicia y el Desarrollo. Además de los sagrados valores religiosos, la figura del Rey continúa siendo casi intocable e igualmente sagrada, como demuestra la detención en febrero de 2012 y la posterior condena a un año de cárcel del joven bloguero Walid Bahomane, que había publicado en su página de Facebook vídeos y fotos burlándose de Mohammed VI.
Mauritania

Nasser Weddady: Hijo de un diplomático mauritano, Weddady comenzó a implicarse en la política de su país durante la adolescencia como miembro de los círculos opositores. Refugiado en Estados Unidos desde el año 2000, fue detenido por el FBI pocos días después del 11-S en la campaña de detenciones –muchas de ellas arbitrarias- de ciudadanos árabes que siguieron a la caída de las Torres Gemelas. En su blog, Dekhnstan, se ocupa de comentar no sólo la política de su país natal, Mauritania, también de las naciones árabes, con especial atención a las revueltas que han reconfigurado Oriente Medio en los últimos meses. También mantiene una cuenta de Twitter (@weddady). Weddady, que habla cinco idiomas –incluido el hebreo-, es coautor de un libro sobre la primavera árabe publicado recientemente y titulado Arab Spring Dreams: The Next Generation Speaks Out for Freedom and Justice from North Africa to Iran.

  rusia
 
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Rusia

Alexey Navalny: El abogado y activista político ruso se dio a conocer gracias a las denuncias de corrupción constantes que publicaba en su blog sobre las autoridades y las empresas públicas de Rusia: adquiría unas pocas acciones en compañías como Transneft y eso le permitía tener acceso a las cuentas, a menudo irregulares, de las sociedades. En 2010, publicó documentos que demostraban la desaparición de varios millones de rublos en Transneft, la compañía pública encargada de la gestión de los oleoductos rusos. Navalny fue uno de los líderes políticos que motivaron a la población del país más crítica con el Gobierno –localizada sobre todo en las grandes ciudades- para salir a la calle a manifestarse tras las elecciones presidenciales de 2011.
Además de su blog, ha usado su cuenta de Twitter (@navalny), con unos 300 mil seguidores, para convocar manifestaciones. Las autoridades rusas le han detenido en numerosas ocasiones y en julio le acusaron de fraude. Según varias organizaciones de derechos humanos, imputaciones por delitos, como la sufrida Navalny, forman parte de las campañas de hostigamiento llevadas a cabo por la policía contra algunos de los más destacados disidentes. La última detención de Navalny se produjo a mediados de diciembre de 2012 en las calles de Moscú por participar en una protesta no autorizada por el Kremlim.
Siria

Razan Ghazzawi: Esta licenciada en literatura inglesa residente en Damasco, se ha convertido en una de las ciberactivistas con más visibilidad desde que comenzó hace unos meses el levantamiento contra el régimen de Al Assad. A través de su Twitter (@RedRazan) y de su blog Razaniyyat –escritos en inglés-, actualiza de forma continua información sobre la situación en Siria, con especial atención a la represión que sufren los disidentes. Ghazzawi, al igual que otros activistas, ha sido detenida en varias ocasiones por la policía siria acusada, entre otras cosas, de favorecer el enfrentamiento sectario. Se le ha prohibido abandonar el país.

Túnez

Lina Ben Mehnni: Esta joven licenciada en lenguas extranjeras, que proporcionó fotos, vídeos y comentarios sobre la represión del régimen de Ben Alí a través de su blog A Tunisian Girl. La caída del dictador no le ha impedido continuar con su labor crítica sobre la situación en Túnez y en otros países árabes, tratando asuntos como los proyectos de ley que amenazan la libertad de los derechos de las mujeres. Los activistas tunecinos que, como Ben Mehnni – nominada al Premio Nobel de la Paz-, contribuyeron en la medida de sus posibilidades a derrocar al gobierno anterior se enfrentan ahora, al igual que en otros países árabes, a un cambio de estrategia: con los viejos déspotas derrocados, su labor trata de centrarse en la denuncia de la desigualdad, la violencia y la corrupción que los cambios de régimen no han erradicado. Algunos, como el bloguero tunecino Slim Amamou, nombrado ministro, podrán llevar a cabo su labor ostentando puestos de responsabilidad. Además de mantenerse activa en su cuenta de Twitter (@benmehnnilina) y en su página de Facebook, Ben Mehnni ha publicado un libro –Tunisian girl, traducido ya a varios idiomas- que recoge algunos de los post más destacados de su blog publicados durante los vibrantes meses de la revuelta que terminó derrocando al tirano.

Vietnam

Dinh Dang Dinh: Este activista, antiguo oficial del Ejército, se había convertido en uno de los blogueros más activos y conocidos en la blogosfera vietnamita hasta que a comienzos de agosto de 2012 fue condenado a 6 años de prisión por publicar propaganda antigubernamental. Vietnam, controlado por un régimen cada vez más cercano a China, se ha convertido en estos últimos años en una de las naciones asiáticas más represivas contra los activistas opositores que utilizan la Red para criticar a las autoridades. Destacan las numerosas detenciones que se han producido entre los opositores cristianos del país, como el joven Paulus Le Son. Las condenas contra éstos incluyen la cárcel y las estancias en campos de reeducación. Un mes después de acusar a Dang Dinh, los tribunales vietnamitas condenaron a otros tres blogueros –Nguyen Van Hai, Maria Ta Phong y Phan Thanh Hai- a penas de entre 4 y 12 años, imputados de propaganda contra el Gobierno en base al artículo 88 del Código Penal, el artículo más usado por las autoridades para perseguir a los disidentes.
      yemen
 
 
AFP/Gettyimages

Yemen

Afrah Nasser: La fotografía del español Samuel Aranda ganadora del Wordpress Photo –uno de los símbolos gráficos a modo de Pietà de las revueltas en los países árabes- da la bienvenida a los visitantes del blog y de la cuenta de Twitter (@Afrahnasser) de la joven Afrah Nasser. Periodista de profesión, activa en la Red desde 2010, Nasser se dedicó a informar sobre las protestas en Yemen, que comenzaron en enero de 2011 y consiguieron que el presidente Saleh renunciase finalmente a su cargo a comienzos del 2012. Entrevistada por muchos medios internacionales, ha ejercido también como portavoz oficiosa de los manifestantes que exigieron en las calles yemeníes un cambio.
En su blog, también se ha ocupado de informar sobre los ataques estadounidenses con drones que han tenido lugar en su país, como el ataque de al Majala, del que se cumple el tercer aniversario, en el que calcula perdieron la vida 41 personas, entre ellas 21 niños y 14 mujeres. Afrah Nasser se encuentra auto exiliada –son sus palabras- desde mayo de 2011 en Suecia, donde completa sus estudios de periodismo en una Universidad de Estocolmo.

Españoles en París




La Final de las chirigotas gaditanas

Los erasmus pocos y pario la abuela Final 2013

Sí se puede! y Manuel Castells dice cómo





¿Revolución?

Una revolución política es cambiar las formas de gobierno por vías no previstas institucionalmente

Manuel Castells
Manuel Castells

Sin dimisión, revolución!", coreaban los manifestantes contra la corrupción política en las calles del país. Fuerte palabra, evocadora de destrucción y violencia. Y, sin embargo, técnicamente hablando, una revolución política es el proceso de cambio estructural de las formas de gobierno por caminos no previstos institucionalmente. Frecuentemente con acciones pacíficas, aun con episodios de violencia aislada. Las revoluciones surgen de la combinación entre una situación insoportable y el bloqueo institucional a la expresión mayoritaria de la voluntad popular de cambio político. Esa parece ser la situación en España en este momento. De ahí surge el "que se vayan todos" o "el pueblo unido funciona sin partido". En un reciente artículo, el prestigioso periodista Manuel Campo Vidal señalaba la coincidencia de una grave crisis económica y social; la convicción generalizada de que la corrupción política es sistémica y afecta a todos los partidos; una crisis de legitimidad de la monarquía envuelta en escándalos de índole diversa; y un avance notable del soberanismo catalán y, en menor medida, vasco. Según una encuesta de Metroscopia realizada antes de la insustancial comparecencia de Rajoy, la expectativa de voto del PP ha caído al 23,9%, 22 puntos menos que en las legislativas. Y el PSOE, en lugar de ser alternativa, se sitúa por debajo, con un 23,5%. Pero ese porcentaje es sobre votos válidos con una participación, según la encuesta, del 53%. No sólo el primer partido es la abstención, sino que nos gobierna una arrogante entelequia que cuenta con el apoyo de apenas un 13% de los ciudadanos. Y así las cosas, se enroca el presidente, se blinda el PP y se invoca la Constitución que de tanto mentarla para justificar entuertos acabará en la basura de la historia. El 76% no se cree las explicaciones del PP. Y ante todo eso, lo único que pide Rubalcaba, tras titubear, es que dimita Rajoy y pongan a otro de la misma trama, puesto que lo que parecieran revelar los papeles de Bárcenas es una trama extendida al conjunto del liderazgo del PP y organizada en su origen por Aznar. Si Rajoy está pringado, lo están todos. Y si Rubalcaba no pide elecciones es porque sabe que el revolcón le alcanzaría a él y se podría estar en una situación de hundimiento de los grandes partidos. Si el rechazo contra el PP y los partidos es generalizado, en promedio un 80% según los temas, y los partidos se niegan a convocar elecciones, en medio de una crisis total, no es disparatado hablar de la necesidad de una revolución política pacífica. ¿Pero cuál?
He consultado fuentes diversas, tanto dentro del 15-M como de ciudadanos indignados por libre. Y se perfilan algunos escenarios posibles. No son fantasías juveniles, sino que tienen el precedente de Islandia, donde las movilizaciones del 2008 y el 2009 obligaron a convocar elecciones en las que se hundieron los dos grandes partidos tradicionales y pasó a gobernar una coalición que nacionalizó los bancos y elaboró una nueva Constitución con amplia participación ciudadana por internet. Hoy Islandia crece más que Alemania y goza de estabilidad financiera y política. Es un pequeño país, pero la democracia no depende del tamaño de la población, sino de la voluntad del pueblo.
El cambio político podría empezar con la convocatoria inmediata de elecciones mientras administra el país un gabinete técnico de consenso. Pero por sí mismas las elecciones no resuelven el problema, porque casi todos los partidos actuales forman parte de ese sistema deslegitimado para la mayoría de los ciudadanos. La palanca del cambio podría ser una coalición compuesta por asociaciones cívicas con apoyo de alguno de los pequeños partidos existentes coincidentes, como en Islandia, en un solo punto programático: elaborar una nueva Constitución que reforme el sistema político, incluyendo una ley electoral, control de la financiación y medidas concretas contra la corrupción previa investigación y sanción de las irregularidades cometidas. El mecanismo de reforma de la Constitución debería ser ampliamente participativo, como en Islandia, e incluiría el debate sobre las nacionalidades del Estado y sobre el control de la banca. Una plataforma electoral de este tipo tendría una posibilidad real de llegar al Gobierno contando con un apoyo de los movimientos sociales, de jueces realmente defensores de la justicia y de periodistas profesionales que influyeran en sus medios. Lo demás sería cuestión de iniciar una reforma política en profundidad mientras un gabinete provisional y supeditado a los electos gestiona la crisis defendiendo los intereses de la gente.
Precisamente porque es posible un cambio pacífico por vía electoral los grandes partidos rechazan las elecciones. Y ahí se plantea cómo obligarlos a su convocatoria. Mis interlocutores hablan de una movilización multiforme que incluya manifestaciones, ocupaciones del espacio público y ocupaciones de edificios en los que funciona una administración que en la práctica ha usurpado el poder. Edificios que podrían ser ocupados desde dentro por quienes ahí trabajan. Claro que la policía impide ocupar el Parlamento, pero sería imposible prevenir la ocupación de centenares de edificios en todo el país. Lo cual requeriría que millones, no miles, fueran los ocupantes. Por tanto, se trata de conseguir una movilización mucho mayor de la ciudadanía. Y ahí es donde la ocupación simbólica del espacio de la comunicación por los profesionales de los medios y por internet desempeña un papel decisivo. Si la intransigencia de los políticos continúa, formas de desobediencia civil más radicales pueden desarrollarse, desde suspender el pago de hipotecas hasta retener el pago de impuestos esperando un gobierno que el movimiento considere democrático. Y con la posible cooperación de unos policías que cada vez están menos dispuestos a ser los malos de la película en temas en los que en realidad están de acuerdo. Si una clase política deslegitimada (para el 60% la mayoría de políticos no son honestos) rechaza una reforma creíble de sí misma, una revolución, adaptada en formas y contenidos a nuestro contexto histórico, tiene más visos de realidad que la permanente ocupación del Estado por unos representantes en los que los ciudadanos no se reconocen representados.

Curiosa entrevista de J. Verstringe con Diario Kafka

"Me veo muy rojo y muy enfadado. Sin nada que perder"

Jorge Vestringe
Jorge Vestrynge, Manuel Fernández-Cuesta, Rafael Reig durante la entrevista. FOTOS: ALEJANDRO LAMAS

Jorge Verstrynge recibe al personal de DK en su casa, que recuerda más al Barrio Latino que a una vivienda madrileña. El salón, lleno de libros de bolsillo desencuadernados de tanto leídos, huele a tabaco negro. Verstrynge (Tánger, 1948), es profesor titular de Ciencia Política de la Universidad Complutense de Madrid. Considerado, en su día, delfín de Manuel Fraga, alcanzó la Secretaría General de AP (antecendente del PP), antes de iniciar un largo camino, en sentido opuesto, en una evidente soledad. Ahora es un rojo inteligente. Muy rojo. Y combativo.
 
Diario Kafka: Hablemos de tu trayectoria. ¿Has dado más o menos vueltas que Jon Juaristi, por ejemplo?
Jorge Verstrynge: Yo soy hijo de la Segunda Guerra Mundial. Nací cuando la pistola con la que se mató Hitler todavía humeaba. Los europeos que crecimos en las colonias tuvimos un problema cuando llegamos a los diez o doce años: nos enteramos de que el sitio en el que habíamos nacido era de otros, y eso no nos lo habían explicado. Tánger y Rabat eran mi casa, hasta que llegó un momento en que los árabes, con toda la razón, dijeron: usted ha venido aquí y nos ha echado a punta de bayoneta, así que ahora, como decía la famosa frase: o maleta o ataúd. O te largas o aquí te quedas, pero bajo tierra. Así fue en Argelia, aunque no tanto en Marruecos. Mi padrastro, que está ahí en la foto ( JV señala un cuadro en su salón), junto al retrato de Robespierre, era comunista, mientras que mi padre biológico había sido proalemán durante la Segunda Guerra Mundial. Eso te crea una situación un poco esquizofrénica. Aún hay gente que me para por la calle y me dice: si te hubieras esperado, habrías sido líder de la derecha en lugar de Aznar. Y un día, Mercedes, mi mujer, le respondió a uno: “No tiene usted ni idea, porque si mi marido hubiera sido presidente del Gobierno con la derecha, habría nacionalizado la banca, los seguros, la industria, las autopistas, las grandes superficies… y por tanto, al cabo de tres meses, estaría muerto, porque le habrían puesto una bomba”. Y es cierto. Fui un joven fascista hasta los dieciocho años y vivía una situación de esquizofrenia que algún día tenía que resolver. Los azares de la vida me hacen evolucionar desde el fascismo, primero, hacia el nacional-comunismo, que nunca he abandonado, que permanece. Siempre me ha encantado la idea de juntar comunismo y nación. Luego aterricé en la derecha española y empiezo a escribir sus discursos. El único artículo que me ha publicado El País, el único, no lo firmaba yo: se lo escribí a Rafael Pérez Escolar. Y así seguí evolucionando hacia planteamientos que en España no tenían más remedio que ser parademocráticos, por así decir. De esta forma empezó mi carrera política. Por azar, porque pasaba por un pasillo —nadie quería ser Secretario General—, me señalaron y dijeron: pues ése. Me transformé en Secretario General de Alianza Popular. Y tuve una vida un poco esquizofrénica hasta que llegó un momento en que dije: esto es absurdo, no puedes ser dos cosas a la vez. Entonces emprendí un viaje hacia la izquierda muy curioso, porque en la autopista todo el mundo iba en sentido inverso, de la izquierda a la derecha, y yo, como un kamikaze, de la derecha a la izquierda. Me di más hostias que la puñeta, claro. Recibí insultos, fui denigrado, me quedé solo…
DK: ¿Quién te trató peor en ese viaje, la derecha o la izquierda?
JV: La izquierda me miraba con reticencia, pero luego entendí por qué: una parte de esa izquierda ya no era de izquierdas. Un día tuve una entrevista con el presidente de Madrid del PSOE y me preguntó: ¿Tú quieres? ¿Quieres un cargo? Le dije que sólo eso me faltaba, que dijeran que me había ido por un cargo. Habría podido hacer caso a Julio Anguita, que me dijo: vente con nosotros, que no somos sectarios. Es que no soy creyente, le respondí, porque para ser comunista hay que ser creyente y a mí me habría encantado, pero no creo. No me hubiera importado ser comunista, porque creo que es la idea más generosa que ha parido la humanidad. Así que me quedé solo. Me acuerdo una vez que fui a un congreso del PCE a ayudar a Paco Frutos y nos hicieron una foto. Hubo gente que protestó y le dijo a Paco: ¿Pero cómo te has dejado fotografiar al lado de esto? Ahora la cosa es distinta, pero he de decir que nunca Mundo Obrero ha citado uno de mis libros. Tampoco pasa nada. Mi relación con los comunistas era curiosa. Por un lado, había desconfianza. Por otro lado, en cambio, se decían: éste en el fondo es de los nuestros, porque su padre era comunista…
DK: O sea, que además de una cuestión de fe, se conoce que es hereditario…
JV: Sí, algo así. Pasar del nacional-comunismo al comunismo no es difícil. Basta con no pronunciarse sobre esa estupidez que dice que el mundo del trabajo es universal y no conoce patrias. Pero es al revés: el capital nunca ha tenido ninguna patria. Si el mundo del trabajo hubiera reconocido que tiene patria, quizá nos hubiera ido de forma diferente.
Jorge Vestringe
DK: ¿Tú eres un gaullista social, un gaullista de izquierdas, un jacobino gaullista?
JV: Hombre, yo soy jacobino porque soy medio francés.
DK: Pero podrías ser francés y no jacobino.
JV: Ni hablar. Un francés como Dios manda es jacobino. Eso está claro, hasta ahí podíamos llegar. Mi relación con De Gaulle es compleja. A los diecisiete años yo odiaba a De Gaulle, “ la grande zorra”, esa gran puta que vendió Argelia a los argelinos, etc. Luego te das cuenta de que el viejo tenía razón. Hay que devolver Argelia a los argelinos porque era suyo, tierra de ellos. Había que hacer de Francia algo que no fuera una potencia colonial al estilo antiguo, algo distinto. ¿Por qué echo tanto de menos a De Gaulle? Porque es uno de esos personajes que llegan una vez cada cien años y ahora no hay un De Gaulle. Un gaullismo de izquierdas, sí. Aunque creo que el gran error de De Gaulle, al final de su vida, fue no ponerse al frente de Mayo del 68. Para un tío que era rupturista hubiera sido lo lógico. Fue rupturista con el ejército de su tiempo, odiaba a la burguesía, a la clase alta francesa y también a la clase media, de los que decía: son como bueyes, no se mueven. Un tío así, sin embargo, estuvo al otro lado de la barrera en 1968 y se equivocó. Pero De Gaulle es grande. De Gaulle, c’est la France.
DK: Y de De Gaulle pasemos a alguien que tú has conocido muy bien: Manuel Fraga.
JV: Yo pensé de verdad que Fraga era De Gaulle en España. Luego comprobé que no. Fraga hubiera sido con respecto a De Gaulle como Napoleón III en relación a Napoleón Bonaparte. Fraga tenía un lado jacobino y un lado social que el PP de hoy no tiene. Fraga estaba más a la izquierda que el PP de hoy, para qué nos vamos a engañar. Pero le faltaba la estatura de De Gaulle. A Fraga le encantaba el poder, como a De Gaulle, pero más un poder personal que un poder por España. De Gaulle trascendía la aspiración personal por el poder; Fraga no.
DK: ¿Y Aznar?
JV: Aznar fue un buen ayudante mío, era un tipo trabajador, inteligente, constante. Nos separaba que él pertenecía a una familia española de abolengo, una familia que siempre había estado cerca del poder, y yo no. Yo venía de una familia de mindundis colonialistas; o no colonialista, como mi padrastro. He de decir que, cuando fue ayudante mío, nunca conspiró, nunca metió la pinza… ni la mano. Lo que no había forma de saber era qué pensaba Aznar, porque era un tío muy callado. Hasta años después no supe que su libro de cabecera eran las Obras completas de José Antonio Primo de Rivera. Aunque luego amplió estudios: Margaret Thatcher, Reaganomics y estas cosas. Conmigo no fue un mal tío. De hecho, cuando yo me fui, mientras todo el mundo gritaba “¡Bingo! ¡Corre el escalafón!”, Aznar fue el único que vino a verme y se tiró tres cuartos de hora intentando convencerme de que no me fuera. Ante eso, me quito el sombrero, porque habría podido haber aplaudido como los demás, al ver que corría el escalafón. De hecho, luego él mismo subió en el escalafón, pero no me empujó a irme para ponerse él, sino al contrario, intentó que me quedara.
DK: De Aznar a Rajoy.
JV: A Rajoy le conocí cuando era presidente del partido en Pontevedra. Un chico de buena familia, en el sentido clásico de la palabra. Era un personaje educado y correcto, que chocaba constantemente con Fraga, que era un animal. Fraga odiaba a Rajoy y Rajoy despreciaba olímpicamente a Fraga. Tampoco tengo ninguna queja de Rajoy. Pertenecía a la derecha clásica gallega, pero no diré que fuera como Álvarez Cascos, un señorito de Gijón, porque Rajoy tenía más sentido de la medida y más elegancia social, vamos a decirlo así. Ahora bien, ¿qué es lo que piensa Rajoy? Nunca lo he sabido. Tampoco es importante. Rajoy cumple con su papel, se hace con el poder en la derecha, se hace con el poder en el Gobierno de rebote. No era un personaje destinado a ser un líder.
DK: ¿Y los banqueros? Cuéntanos tu visión de los banqueros que mandan en España.
JV: Los banqueros que mandan en España son reflejo de la derecha española, que es la derecha más reaccionaria que yo he conocido en Europa. Solamente la sobrepasa la derecha venezolana, que ya es de vomitona. Mirad estos dos platos que hay en la mesa ( señala dos grandes recipientes de barro, uno más pequeño que el otro). Este plato grande es para vomitar ante la derecha venezolana y éste, un poco más pequeño, ante la derecha española. La derecha financiera española es abyecta, abyecta. Con una excepción: Rafael Termes, con quien tuve una relación cordial. Y los hermanos Valls. El resto de los financieros y de la banca española era de vómito. Iban a la ley del chollo, creían que había que saltar de inmediato sobre cualquier duro que pasara, aunque a largo plazo no fuera rentable. No tenían la menor visión de futuro del país o del interés general. El país les importa en la medida en que el país les reporta, pero ellos no son del país. Son tíos sin patria.
Jorge Vestringe

DK: ¿Y un centauro de financiero y político como Rodrigo Rato?
JV: Rato es un niño mimado de una familia que lo que ha tocado lo ha hundido, astilleros, Trinaranjus, FMI… Los del FMI bailaban de alegría cuando Rato se fue, porque decían que jamás habían visto un director tan absolutamente vago y tan absolutamente inútil. Rodrigo Rato es el subproducto político de una derecha económica que, a su vez, es un subproducto de baja categoría de la derecha europea. No dan el nivel.
DK: ¿La derecha es más de derechas ahora que en tus tiempos?
JV: Sin duda. En el bachillerato a mí me dieron a leer un libro que se llamaba La función social de la propiedad. Aquí, de eso, nada. Aquí la derecha viene ejemplificada por el apellido del dueño del Santander: Botín. La derecha que hay hoy, comparada con la de la época de Fraga, tiene un planteamiento más de derechas, más descarnado, menos patriótico, más cutre.
DK: ¿Y la izquierda?
JV: El problema de la izquierda es que en un momento determinado descubre las virtudes del mercado y al mismo tiempo las virtudes de la corrupción. Por eso en mi último libro, Viva la desobediencia, la palabra izquierda va entre comillas. La evolución del PSOE fue hacia la aceptación del liberalismo y del mercado. Una frase que dijo Felipe González lo resume todo: “Los que protestan son los que han quedado orillados por la mundialización”. Ah, cojonudo, pero yo pensé que precisamente ésa era la gente a la que tú tenías que defender. Pues por lo visto no. Me acuerdo un día que le llevé a Alfonso Guerra un libro y me dice que le gusta, que las medidas que propone son muy buenas. “Pues aplicadlas”, le digo yo. “Uuuuuy, imposible”, me responde. “¿Por qué?” “Porque Felipe ya está muy lejos de esto”, me dice. Y añade: “Mira, Jorge, desengáñate, no existe nadie en España ya al que un buen talón no pueda comprar”. Eso me dijo, así que apaga y vámonos. La izquierda socialista se ha vendido. Es lo que me decía mi padrastro: solamente una vez pude votar comunista, todas las otras tuve que votar social-traidores. La izquierda-caviar, la izquierda de El País, ha abjurado de su clase social. De ahí que les guste tanto la inmigración: es tan cómodo tener una tata peruana que le limpie el culito a la abuela a la que tú no se lo quieres limpiar. Y eso se lo plantean como si fuera ser progresista. Pues no, perdona, están llevando a cabo una guerra contra su propio pueblo al que han abandonado frente al capital.
DK: ¿Qué separa al PSOE del PP entonces?
JV: Nada. El PP ahora está aplicando la política que inauguró el PSOE. Está pisando el acelerador porque tiene mayoría absoluta. Lo está pisando tanto que corre el riesgo de descarrilar, pero la política es la misma que aplicó Zapatero al final de su mandato. Al principio aplicó otras: políticas sociales, matrimonio homosexual y esas cosas. No digo que no sean importantes, pero son colaterales en relación con la lucha de clases que se está llevando a cabo entre ricos y pobres y donde los pobres, evidentemente, están siendo machacados. Mira, una vez le dije al ministro José Blanco: algo habrá que hacer con el tema de las hipotecas. Esto fue hace cuatro años. Le dije que podíamos acogernos constitucionalmente a medidas de excepción considerando que estábamos en estado de emergencia económica. Unos alumnos míos habían preparado unas propuestas: que el Banco Central Europeo, el Gobierno de España y el Banco de España decretaran una situación de excepción económica y, mientras durase, se suspendiera el pago de las hipotecas. Blanco se me queda mirando y me dice: “¿Y quién paga a los bancos?” Y le digo: “Joder, pero si los bancos han estado ganando una pasta considerable todos estos años”. “Ya, ya”, me dice, “pero ¿quién paga a los bancos?” En ese momento a Blanco no le preocupó quién realoja a la gente desahuciada, sino quién paga a los bancos.
DK: Y quizá también quién paga a los partidos políticos, si los bancos no cobran…
JV: No creo que se trate de eso: es por convicción.
DK: Eso es todavía más triste.
JV: Claro, es que han asimilado el mantra: el mercado es lo que funciona. Los bancos son el motor del crecimiento, etc. No es verdad: el motor es la gente que trabaja, la que crea plusvalía. Los bancos no crean plusvalía, sino que se adueñan de ella. Desde la guerra contra Serbia yo ya sabía que el PSOE había cambiado de bando, pero en esa conversación me di cuenta de que estaba todo perdido. El problema es que los socialistas en España han mutado mentalmente. Se han pasado al sistema.
DK: ¿Y por qué entonces, si el PP y el PSOE están tan cerca, Izquierda Unida no tiene más hueco electoral?
JV: Porque arrastra el lastre del fracaso del comunismo; bueno, de lo que se llamaba comunismo. El derrumbe de la URSS repercute sobre los comunistas, por mucho que aquello no fuera comunismo. Durante mucho tiempo la izquierda de verdad, los comunistas, van a seguir pagando esa factura. Cuando los jóvenes ya no tengan esas referencias de Hungría, Checoslovaquia, etc., los comunistas les parecerán más acogedores. A pesar de todo echo de menos en los comunistas actuales un planteamiento más populista. Yo me considero en gran parte populista. Ser populista no es ser demagogo. Creo en un populismo de izquierdas. Por eso me gusta Chávez. Por eso me gusta en cierta forma De Gaulle. El populismo es una revolución drástica. Tú puedes suprimir la propiedad privada de los medios de producción, pero al final eso es reversible. En cambio, entregarle el poder al pueblo, acierte o se confunda, es distinto, porque puede ocurrir que el pueblo no renuncie jamás al poder. Por eso una revolución populista da tanto miedo al poder. Por eso asusta tanto Chávez.
DK: Basta con ver el tratamiento informativo que le da El País.
JV: Eso ha sido vergonzoso, ha sido abyecto. Yo me quedé petrificado cuando dieron el golpe de Estado contra Chávez y Trinidad Jiménez dijo por la tele: Ya está volviendo la democracia a Venezuela. Ahí estaban juntos el PSOE y Aznar contra Chávez.
DK: Bueno, cambiemos de tema. Tú, sobres, ¿no viste nunca en el partido?
JV: No había sobres entonces. Por dos razones. Primero, Fraga no era un tío de sobres y yo menos. Yo me creía lo que hacía. Y segundo, el partido era tan pobre que no había sobres para nadie. Entonces nos lo creíamos. Ahora no. El problema de la Transición es que nos la vendieron como un punto de partida y realmente era un punto de llegada. Un “esto es lo que hay” con una Constitución que pegaba un cerrojazo. Pensábamos que íbamos hacia otra cosa, pero ese era el límite.
DK: ¿Esto de los sobres tiene que ver con la falta de desarrollo de una ley de financiación de los partidos?
JV: No lo creo. Siempre ha habido dinero negro en los partidos y siempre lo habrá. Además, ahora el dinero se ha colocado por encima de las personas. Tanto tienes, tanto vales. Es una corrupción generalizada de las mentes.
DK: Si es así, ¿por qué además necesitan el prestigio de la cultura? ¿Por qué Zapatero se empecina en leer a Borges y Aznar reivindica a Azaña?
JV: Porque en el fondo sabemos que esto no debería ser así. La derecha española no es culta. Yo, por ejemplo, que procedo del neofascismo francés, en España encontré el desierto intelectual absoluto. La extrema derecha francesa tenía su Céline, su Drieu La Rochelle, su Montherlant. Aquí no se leía más que a Unamuno y a Ortega, pero a Ortega con cuidado. En España, además, no hubo fascismo, de entrada porque el fascismo es laico, es un movimiento de clase media y es un movimiento antimilitar.
DK: Sobre todo en la medida en que el ejército es una aristocracia, como en Alemania.
JV: Y una aristocracia de extrema derecha además. Por eso me hacen tanta gracia películas como Operación Walkiria, que en realidad fue un golpe de extrema derecha contra el fascismo. Caen simpáticos porque se enfrentaban al nazismo, pero que no nos cuenten que estaban comprometidos con la democracia. Más comprometido con la democracia estuvo Stalin que la operación Walkiria o que el desembarco de Normandía, porque si no hubiese sido por los rusos, en estos momentos hablaríamos en alemán. La Segunda Guerra Mundial la ganaron los rusos, no los occidentales. Fíjate, cada vez me fascina más la figura de Stalin. No era un niño de teta, pero ¿quién lo era en aquella época? Y frente a Hitler, si eras un niño de teta, no tenías nada que hacer.
DK: ¿En tu época, el plan de estudios de los jóvenes de la derecha incluía un viaje fin de curso para llevar maletines con dinero para los anticastristas, como ahora?
JV: Qué va, en mi época se creía en la no injerencia en asuntos internos de otros países. Esto ha sido sustituido por la ideología de los derechos humanos. En principio está muy bien. Pero, mira, mis antepasados conquistaron medio mundo con los mejores propósitos, pero de paso lo esquilmaron. Hitler entra en los Sudetes para liberar a las minorías. Y así todo. Y ahora igual: proclamamos la democracia a cañonazos. Es la política de injerencia humanitaria. Así bombardeamos Irak o Yugoslavia.
DK: ¿Y qué piensa de Cuba?
JV: Una pena. Yo he estado en Cuba y se me ha caído el alma a los pies.
DK: ¿Y qué lees de literatura española contemporánea?
JV: ¿Yo? Nada. Yo literariamente soy francés.
DK: ¿Qué futuro le ves tú a España?
JV: Hombre, yo espero que en España haya una rebelión. ( Ante nuestro silencio estupefacto, insiste). Tiene que haber una rebelión en España, si no, no es posible. La revolución no surgirá de España, que es un país periférico, surgirá de Francia, Alemania… Rusia, pero aquí tiene que haber una rebelión. En algún momento habrá que dar un zapatazo. Porque el poder manda sólo porque se le consiente. En algún momento habrá un movimiento ciudadano, porque tal y como estamos, con una clase política desprestigiada y corrompida hasta la médula, con una monarquía que le salen los gusanos de la corrupción que tiene… Yo confío en que el pueblo español va a reaccionar.
( Suena de pronto a todo volumen La Marsellesa: es el sonido de llamada del móvil de Jorge Verstrynge. Cuando vuelve cambiamos de tema).
DK: ¿Qué piensas de internet?
JV: Huy, qué mala pregunta. Tengo un blog hackeado. Me quitaron las claves, las cambiaron y ahora hay un blog mío donde aparecen las mayores barbaridades. También han usurpado mi personalidad en Twitter. Fuimos a la policía. Lo hemos denunciado todo y estamos intentando impedirlo, pero es complicado. Así que mejor dejemos lo de internet. Total, a mi edad, ya no voy a usarlo, se lo dejamos a los jóvenes. Pero, cuidado, no le des una clave nunca a nadie. ¡Ni a tu mujer!
DK: Uno de tus libros se titula Memorias de un maldito. ¿Sigues considerándote un maldito?
JV: No, ya no. Yo me veo a mí mismo muy rojo y muy enfadado. Y sin nada que perder.

De Rubalcaba en Facebook

 
 
Alfredo Pérez Rubalcaba
Para los españoles, Europa siempre representó democracia y libertad. Después, en los últimos veinticinco años, hemos vinculado el proyecto europeo con modernidad y progreso. No es extraño que el euroescepticismo en España haya sido marginal, casi exótico. 
Sin embargo, diríase que de Europa ahora sólo nos llegan Hombres de Negro e imposiciones; que las recetas de austeridad extrema que ahogan nuestras posibilidades de crecimiento son un invento europeo. Y no es así: es la derecha europea, con el PP de disciplinado aprendiz, la que quiere imponer esa política, la que sitúa la disciplina presupuestaria por encima del que debería ser nuestro principal objetivo, que es la creación de empleo. 
Por eso, los socialistas europeos defendemos otra Europa, una Europa social en la que sean los ciudadanos, y no sólo los bancos, los que se beneficien de la solidaridad. Este modelo de Europa, de progreso en libertad, de solidaridad y convivencia, es el que estaba en la mente de los fundadores del proyecto europeo, y hoy es más necesario que nunca.

Mensajes sin clave










Vergüenza nacional que nadie se molesta en impedir





El hombre tenía 36 años, estaba casado y era padre de un hijo. Tenía una orden de desahucio por impago de alquiler
Era activista de la plataforma Stop Desahucios y se suicidó ayer en Córdoba. Según han confirmado fuentes de la plataforma, el hombre se arrojó al vacío desde una cuarta planta de la calle Cartago, donde vivía. Según algunas fuentes, la víctima había recibido una orden de desahucio por el impago del contrato de alquiler y estaba también agobiado por otras deudas. 

 Cerca de 500 personas se concentraron el viernes en el bulevar del Gran Capitán de Córdoba para protestar contra los desahucios y guardar varios minutos de silencio en recuerdo de un hombre de 36 años que se ha suicidado tras recibir una comunicación de una deuda que mantenía con Hacienda.
El portavoz de la plataforma Stop Desahucios en Córdoba, Rafael Blázquez, ha dicho que la víctima era miembro de esta organización y había acudido a la misma tras entregarle las llaves al banco y ser desahuciado, ya que no podía hacer frente a una hipoteca.
Según Blázquez, la carta que ha recibido de Hacienda ha sido "la gota que ha colmado el vaso" y "no ha visto ninguna salida".
El portavoz de la plataforma ha hecho un llamamiento para que a la gente que le amenacen de desahucio "no se vayan de su casa", "hagan desobediencia civil" y "que se resistan, no como hizo él".
Blázquez ha lamentado que en esta situación, el Gobierno "se plantee este martes paralizar la Iniciativa Legislativa Popular (ILP)" que la plataforma ha presentado para evitar los desahucios.
"Si hacen eso, que sepan que nos van a tener enfrente y tendremos que ir a la Moncloa, al Congreso o donde haga falta y el pueblo tendrá que revelarlos en su función de Gobierno", ha remarcado.
Durante la concentración, los manifestantes han gritado "asesinos" y han exhibido carteles en los que se leía "No es un suicidio, es un homicidio".
Por su parte, otro miembro de la plataforma, Rafael Carmona, ha señalado que es "una absoluta barbaridad" que la víctima entregase la casa como dación en pago y siguiera debiendo 25.000 euros.

De uno de los blogs de Público.es

La penúltima canallada del Gobierno


Sebastián Martín - 09 feb 2013
Profesor de Historia del Derecho de la Universidad de Sevilla
Desde el pasado 17 de enero, todo aquel que obtenga de modo fraudulento, “para sí o para otro”, una prestación de la Seguridad Social ha pasado a ser un delincuente. Los autores de este nuevo delito, recogido en el artículo 307 ter del código penal, podrán ser castigados, en los casos de menor gravedad, con una multa, en los ordinarios, con “pena de seis meses a tres años de prisión”, y en los que la cantidad defraudada supere los 50.000€, con pena de cárcel de dos a seis años y una multa.
Dado el “populismo penal” reinante, muchos celebrarán la creación de este delito. Abundarán quienes crean que si esta clase de corruptelas no se incluyen en el código penal quedan irremediablemente impunes. Nada más lejos de la realidad. El Estado dispone de dos medios para perseguir y reprimir los ilícitos: la vía administrativa, a través de sanciones pecuniarias, y la vía penal, con la cárcel como castigo principal. En un modelo punitivo garantista, y en virtud del principio democráticode intervención mínima, la respuesta penal solo puede ser la ultima ratio, el último recurso, una vez comprobada la esterilidad de otros medios.
Dando muestras de su inclinación autoritaria, el gobierno ha decidido recurrir a la legislación penal sin haber probado antes a reformar el régimen administrativo. El disfrute indebido de prestaciones de la Seguridad Social se consideraba hasta ahora incluido en el antiguo art. 308, en el que se castigaba la obtención fraudulenta de subvenciones públicas a partir de 120.000€. Al equiparar subvenciones y prestaciones se había consolidado la práctica de considerar delito solo el fraude a la Seguridad Social superior a esta cantidad.
Los casos de montante inferior se encontraban regulados en el Texto Refundido de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social (RDL 5/2000). Ahí se tipifican, como “infracciones graves” (art. 25), la realización de “trabajos por cuenta propia o ajena durante la percepción de prestaciones” o “no comunicar, salvo causa justificada, las bajas en las prestaciones” con el objetivo de seguir percibiéndolas. Y como “infracciones muy graves” (art. 26) “actuar fraudulentamente con el fin de obtener prestaciones indebidas o superiores a las que correspondan, o prolongar indebidamente su disfrute”.
Cierto es que las sanciones previstas para estos actos resultaban irrisorias. Reintegrar las cantidades percibidas de modo ilícito, perder hasta seis meses de prestación o, en los casos de incapacidad temporal y desempleo, exponerse a la extinción de la misma, puede parecer, con toda razón, un riesgo asumible y muy poco disuasorio. Ahora bien, para remediar esta carencia habría bastado con endurecer el régimen sancionador introduciendo diferentes multas. El gobierno, sin embargo, ha preferido tomar la vía de la criminalización de estos ilícitos, y lo ha hecho además de forma reprobable, exhibiendo un inadmisible sesgo legislativo y atentando contra la seguridad jurídica, protegida expresamente por la Constitución en su art. 9.
Para percatarse del trato discriminatorio dispensado por el legislador a los trabajadores basta con cotejar algunos de los delitos comprendidos en la Ley Orgánica 7/2012, de reforma del código penal en materia de lucha contra el fraude. El tipo ordinario por defraudar a la “Hacienda Pública estatal, autonómica o local” (art. 305) está previsto para cantidades superiores a 120.000€ y castigado con una pena de uno a cinco años de prisión. En caso de fraude a la Seguridad Social por impago de cuotas u obtención ilícita de deducciones –delito cometido por empresarios–, el art. 307 prevé la misma pena y la aplica para cantidades superiores a 50.000€. Sin embargo, en el caso de disfrute indebido de prestaciones por parte de los trabajadores, el art. 307 ter no dispone cuantía mínima alguna y sanciona con hasta tres años de prisión los fraudes inferiores a 50.000€.
El trato desigual resulta asimismo evidente si comparamos los diferentes tipos agravados: los delitos contra la hacienda española (art. 305 bis) se castigarán con cárcel de dos a seis años a partir de 600.000€ defraudados, a los cometidos contra la Seguridad Social por parte de los empresarios (art. 307 bis) se aplica la misma pena a partir de 120.000€, e idéntica sanción está prevista para el disfrute indebido de prestaciones por parte de los trabajadores, pero para una cantidad superior a los 50.000€ (art. 307 ter).
No existe justificación para este trato desigual. Resulta discutible que el bien jurídico protegido sea de naturaleza esencialmente diversa en los casos de los delitos contra la Hacienda Pública o contra la Seguridad Social. Si es cierto que esta última abona las prestaciones elementales del Estado social, con cargo a la primera se financian servicios fundamentales como la sanidad y la educación. El quebranto financiero a una y a otra debería revestir igual gravedad, aplicándose idénticos criterios cuantitativos en su punición.
Y no solo cuantitativos. El art. 307 ter también contrasta con el resto de tipos previstos en la L.O. 7/2012 por su redacción. Es todo un ejemplo de lo que no se debe hacer en un sistema punitivo garantista. La extensión del tipo penal, la imprecisión de sus conceptos, las referencias subjetivas y el poder de disposición que confiere a los jueces en la determinación de la pena son viva muestra de hábitos legislativos autoritarios.
La nueva disposición equipara legalmente a cómplices y autores al castigar con igual pena a quien obtiene la prestación, a quien la ha conseguido para un tercero e incluso a quien ha facilitado a otros su obtención. En lugar de vincular las penas a importes exactos, como hace en los restantes casos, el legislador deja en manos de los jueces distinguir entre fraudes graves y menos graves para cantidades inferiores a 50.000€. Y tal distinción es crucial, pues de ella depende que se aplique la pena de multa o la de prisión hasta tres años.
En este punto se atenta de forma palmaria contra el principio de estricta legalidad, ya que para identificar los casos que “no revistan especial gravedad”, castigados con pena de multa y no de cárcel, el juez deberá atender al “importe defraudado” y a “los medios empleados”, pero también a “las circunstancias personales del autor”.
Que el juez tenga que entrar a indagar en tales circunstancias personales puede dar pie a prácticas funestas. Se dirá que semejante inciso tiene la finalidad de permitir a los tribunales valorar cuándo el fraude se realizó en situaciones de urgencia. Sin embargo, para estos casos el propio código ya dispone en su art. 20.5 la eximente del “estado de necesidad”. Al referirse a dichas “circunstancias”, la ley no ha hecho otra cosa que permitir posibles valoraciones judiciales de todo punto inaceptables en un Estado constitucional.
Reformas como la presente ponen de manifiesto el despotismo del gobierno actual. Ha tenido que ser una periodista, Olga Rodríguez, quien la destape y denuncie, pues parece que los “jóvenes expertos” del PSOE y los cuadros de IU no disponen del tiempo necesario para consultar el BOE. Lamentable negligencia, dada la gravedad de la medida, que con su criminalización de ilícitos cometidos en las capas populares avanza un paso más en este proceso de Gran Regresión que estamos sufriendo

Debería ser de obligada lectura para La Casta

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"La política sin ética es ilegítima"

"La política sin ética es ilegítima"

EXPLORADORA DEL SER HUMANO
Cortina (Valencia, 1947), catedrática de Ética y Filosofía Política de la Universidad de Valencia, dirige la Fundación Étnor para la Ética de los Negocios y de las Organizaciones. Su Ética de la razón cordial ganó el Premio Internacional de Ensayo Jovellanos 2007 y en 2008 fue la primera mujer en ingresar en la Academia de Ciencias Morales y Políticas. Su última obra es Neuroética y neuropolítica. Las bases cerebrales de la educación moral (Tecnos, 2011). Su gran propuesta: una ética capaz de aunar inteligencia, sentimientos y coraje, donde la compasión haga latir la justicia.

-La corrupción parece haberse infiltrado en el alma de España. ¿Su diagnóstico?
-No tenemos ningún sentido de lo que nos debemos unos a otros. La gente se pregunta “si puedo, ¿por qué no?”.
-"El dinero público no es de nadie" (Carmen Calvo, ministra de Cultura, mayo 2004). ¿El síntoma del desastre?
-La causa del desastre. En otros países se cuida lo público con esmero, porque es de todos. En España se viene diciendo que lo que es de todos no es de nadie desde años sin cuento.
-Lo que no es de nadie es el patrimonio de la corrupción que afecta tanto a derechas como a izquierdas, ¿o hay ideologías más proclives?
-No. El problema no es de ideologías, sino de personas concretas, de determinadas tramas, de malos hábitos, de costumbres. Los males y los bienes suelen tener nombres y apellidos, no es cosa de ideologías políticas.
-¿La última idiotez que ha escuchado?
-Que lo bueno para una comunidad, situada en un Estado democrático, es independizarse de él. Como si no viviéramos en tiempos en que la interdependencia es vital. Habría que instituir un Día de la Interdependencia tanto para España como para la Unión Europea y tratar de llevarla a cabo.
-¿Ética y política (o cosa pública) son incompatibles?
-Todo lo contrario: se necesitan mutuamente. La ética sin proyección pública queda en escapismo, y la política sin ética es ilegítima.
-Y eso que la palabra ética nunca estuvo tanto en nuestra boca: que si ética de las finanzas, ética empresarial, ética de los negocios...
-Es una palabra que, más que de moda, está de actualidad. Eso significa que pertenece a la entraña de la humanidad, pero sólo en algunas épocas nos damos cuenta de que es necesaria y entonces se habla de ella constantemente. Algunos piensan: “dime de lo que alardeas y te diré de lo que careces”. Yo creo más bien que nos damos cuenta de que nos hace falta, aunque pocos estén por la labor de incorporarla.
-De la ética del consumo no le hablo porque ya no se compra.
-No se compra porque los bancos no prestan, las Administraciones no pagan, las empresas reducen puestos de trabajo o cierran y el desempleo aumenta hasta la desesperación. Pero de ética del consumo hay que hablar, porque seguimos convencidos de que en el consumo está la felicidad, y no en las relaciones humanas. Lo cual es un error craso.
-Honestidad, otra palabra para la memoria.
-Más que para la memoria, para construir un mejor presente y un buen futuro: gracias a que hay gente honesta siguen funcionando algunas cosas; si aumenta su número, tendremos un mundo más humano.
-Sigamos con el repertorio: igualdad, justicia...
-Andan muy dañadas por la actuación de jueces, funcionarios, políticos, banqueros. Pero también por una ciudadanía que sigue despreciando a los pobres, a los que parecen no tener nada que ofrecer a cambio.
-Sobre la fraternidad usted sustenta su ética de la razón cordial.
-Si no hay compasión, si los demás no nos importan ni forman parte de nuestro proyecto de vida feliz, las cosas no tienen arreglo. Aunque se promulgaran leyes espléndidas, no se cumplirían, porque no es el miedo al castigo lo que guarda la viña, como se echa de ver todos los días, sino la vivencia de la fraternidad
-¿El debate público-privado en sanidad y educación también pone en jaque el principio de igualdad?
-Sobre todo en sanidad. Se está desmantelando un sistema público razonablemente justo y facilitando las cosas al sector privado sin explicar hacia qué modelo vamos. La sospecha es que tendremos una sanidad para ricos y otra para pobres.
-Y en medio de esta tormenta perfecta, la clase media hace aguas. ¿Un salvavidas para ella?
-Exigir derechos, cumplir obligaciones, practicar la solidaridad.
-Pero dígame, ¿cuál es la conciencia moral de la época que vivimos?
-La de tratar de vivir lo mejor posible, incluyendo a los seres queridos, cooperar con los que pueden darme algo a cambio y olvidar al resto.
-Lo justo no siempre es bueno...
-Más bien al revés: por “bueno” se suele entender el bienestar individual, y entonces las exigencias de justicia molestan, entran en conflicto con el bienestar.
-La penúltima batalla de nuestra libertad se libra en las neurociencias.
-Como explico en Neuroética y neuropolítica, algunos aseguran que estamos determinados a actuar por nuestras neuronas, que la libertad es una ilusión. Pero lo tienen mal: la libertad es real y hay que conquistarla codo a codo con las demás personas.
-¿Su última reflexión sobre el mundo que nos rodea?
-Que podría ser un mundo cosmopolita, en el que todos se encontraran en su hogar, se sintieran ciudadanos de una patria común. Y que son dichosos los que trabajan para que ese ideal se convierta en realidad.
-Ya ve Ortega que decía “Los españoles. Ese pueblo que ha pasado de querer ser demasiado a demasiado no querer ser” y ahora intentando hacer marca-país...
-Pero seguimos “no queriendo ser”, por desgracia. Es difícil encontrar un país con mayor desprecio hacia sus propias potencialidades. Por eso urge cambiar la tendencia y querer ser lo mejor posible.
-¿Aprenderemos de la crisis, nos hará mejores?
-De momento no hemos aprendido nada. Pero todavía estamos a tiempo de cambiar de tercio y apostar por una ética pública que genere confianza. Eso es lo justo y de lo que hay que felicitarse.