miércoles, 23 de enero de 2013

Evita mencionar a Luis Bárcenas entre los defraudadores salvados por su amnistía fiscal

Montoro dice que su amnistía afloró 40.000 millones aunque sólo recaudó 1.200


Madrid.- El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha facilitado datos novedosos sobre el proceso de amnistía fiscal aprobado el pasado año por el Gobierno: los 40.000 millones aflorados por este mecanismo han aportado a la Hacienda pública exactamente 1.193 millones de euros. Montoro se ha felicitado por ello ya que la cantidad "supone cuatro puntos del PIB" pero lo que indica en realidad es la trampa de la amnistía.
El Ejecutivo dijo que gravaría el capital regularizado al 10% y si hubiera sido así, el dinero recaudado habría sido 4.000 millones de euros. Lo que ha gravado Montoro, sin embargo, ha sido el rendimiento de esos 40.000 millones, es decir apenas el 3% de lo declarado.
Montoro ha dado estos datos durante su primera intervención ante la comisión de Hacienda y Administraciones Públicas del Congreso de los Diputados, en la que se esperaba que explicara si el extesorero del PP, Luis Bárcenas, se aprovechó de la amnistía. La sesión se desarrolla en medio de una gran expectación, tanto política como mediática.
 Pero el PSOE no ha conseguido  el objetivo que perseguía con su solicitud de comparecencia extraordinaria del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que no era otro que conocer la relación del dinero blanqueado por el ex tesorero del PP Luis Bárcenas, gracias la amnistía fiscal aprobada por el Ejecutivo. Sí han logrado, en cambio, encender a un ministro habitualmente manso y calmado, a quien han acusado incluso de favorecer las prácticas corruptas, recibiendo como respuesta del enfadado titular de Hacienda descalificaciones y acusaciones varias.
Montoro, al ser cuestionado por el socialista Pedro Saura por ese 3% sólo pudo responder: "A mi me habría gustado aflorar cuatro puntos de PIB y haber recaudado 300.000 millones de euros". Según las cifras que ha dado Montoro, a la amnistía se acogieron un total de 29.065 personas y de 618 empresas.
El ministro no ha citado a Bárcenas hasta las 14.24 horas, casi dos horas y media después de que se abriera la comisión y en la que era su segunda intervención. En su primera intervención, de hecho, su referencia ha sido indirecta y genérica cuando se ha esforzado – "les voy a dar el titular", ha dicho – en aclarar que "el proceso de regularización extraordinaria no borra ni limpia delitos". Lo ha repetido varias veces en alusión a las denuncias de la oposición de que la medida servía para el blanqueo de dinero. http://www.cadenaser.com/recorte/20120410csrcsrnac_5/XLCO/Ies/ministro-Hacienda-Cristobal-Montoro.jpg



Pedro Saura, que ha ejercido de portavoz del Grupo Socialista durante la comisión del Congreso, ha entrado a matar desde la primera palabra de su intervención. "La amnistía fiscal se ha diseñado para que cientos de Bárcenas se acojan a ella", ha acusado, provocando reacciones airadas de la bancada conservadora que ha criticado la "poca vergüenza" del representante del principal partido de la oposición.
Estas palabras las pronunciaba el diputado del PSOE después de que Montoro negara cualquier tipo de opacidad en el proceso de regularización de los defraudadores. Pero los socialistas no parecen creerle ni una sola palabra. Saura ha llegado incluso a acusar al ministro de "favorecer el blanqueo de capitales y la corrupción" al permitir que los defraudadores "disfruten de su dinero ilícito". Los socialistas, ha insistido, no son los únicos en sostener esta acusación tan grave contra el Ejecutivo. "Lo dicen los inspectores de Hacienda del Estado".
El parlamentario ha acusado al Gobierno de "saber" que los defraudadores podían acogerse a la amnistía fiscal y de acogerse a sus exigencias. Ha recordado que del 10% del patrimonio que se pretendía gravar inicialmente con ese proceso de regularización, se ha pasado únicamente al 10% de los rendimientos de esas ganancias. Y ha lamentado que "no se haya pedido nunca el origen del dinero lícito o ilícito". "No lo decimos sólo desde el PSOE, también lo dicen las asociaciones de inspectores, que no podían mirar esas regularizaciones", ha insistido.
En opinión de los socialistas es especialmente grave lo aflorado tras descubrirse el caso Bárcenas. Por eso Saura ha vuelto a suscribir las palabras pronunciadas esta semana por el líder de su partido, Alfredo Pérez Rubalcaba, instando a Montoro a dimitir si se descubre que el extesorero del PP se ha acogido a esa amnistía fiscal. El diputado ha ido incluso más allá recalcando que "lo que los españoles quieren saber es el origen del dinero de Bárcenas". El ministro se ha ido sulfurando por momentos pero el acaloramiento final, la gota que ha parecido colmar el vaso de la paciencia del titular de Hacienda ha sido la pregunta clara e incisiva del diputado socialista:: "¿El ministro de Hacienda ha cobrado en B?"
Montoro, entonces, ha decidido responder con un nuevo ataque. "La ruindad en la política tiene un límite", le ha dicho a Saura. Además, tras negar esas dádivas por parte del extesorero del PP, ha acusado al diputado socialista de "ensuciar y enfangar" como "estilo" de hacer política. 
Ya en su primera intervención había advertido de la ausencia del líder del PSOE y del de la portavoz parlamentaria, Soraya Rodríguez, en la comisión. Pero en su turno de respuesta al PSOE lo ha vuelto ha recordar visiblemente enfadado. Montoro, en todo caso, no ha hecho ni una sola mención a Luis Bárcenas, y no ha contestado tampoco si el extesorero del PP se acogió a la amnistía fiscal del Gobierno.
El ministro Montoro no ha dicho nada sobre el anuncio realizado por el abogado de Bárcenas de que el extesorero del PP había regularizado hasta 10 millones de euros acogiéndose a esta medida de los 22 millones que el juez Ruz de la Audiencia Nacional le detectó en una cuenta de una entidad financiera en Suiza. Sin embargo, el departamento que dirige Montoro emitió una nota de prensa oficial para desmentir que Bárcenas, como persona física, figurara entre las que se han acogido a esta medida.
Pero el titular de Hacienda y Administraciones Públicas no ha respondidó a las expectativas ni a las preguntas de todos los grupos. "El señor Bárcenas, que no está en el PP desde el año 2009, está acogido al secreto tributario, según el artículo 95 de la ley General Tributaria, excepto cuando él mismo o su representante hace renuncia a ese derecho y hace público sus datos. Como si lo hace cualquiera", ha dicho el ministro en un tono muy formalista.
No obstante, ha hecho hincapié en su "titular" de la primera intervención, esto es en el hecho de que la amnistía fiscal no implica que desaparezcan los presuntos delitos fiscales que pudiese haber incurrido cualquier persona que aflore dinero oculto a la Hacienda Pública. Y ha añadido: "El señor Bárcenas no aparece en la lista [de personas físicas acogidas a la amnistía fiscal]. No puedo decir nada más de lo que no sé . Pero, supongamos, solo supongamos, que se haya acogido [en referencia a Luis Bárcena] oculto en una sociedad. ¿Qué consecuencias legales tiene?, ninguna. Pero no digamos que la regularización evita delitos", ha insistido en otro momento de su intervención final.
Sí ha facilitado los datos globales: en una primera estimación, ha dicho, las personas físicas que se han acogida a esta medida han sido 29.065 y el número de empresas ha a alcanzado la cifra de 618. Al dar estos datos tampoco se refirió a Bárcenas. En todo momento habló de “proceso de regularización fiscal” y tan solo habló de “amnistía fiscal” para referirse al proceso que abrió el Gobierno socialista en 1991 con similares propósitos para enfatizar que en aquella ocasión, a diferencia de ahora, “fue opaca” mediante la adquisición de deuda pública.
"La amnistía que aprobó en1991 el gobierno socialista, un Gobierno en el que Rubalcaba era secretario de Estado, ocultaba la identidad de los defraudadores, al contrario de lo que hace esta. En lugar de estar pidiendo mi dimisión por los pasillos del Congreso, podría estar aquí escuchando mis explicaciones", dijo.
En otro momento destacó que entre las bondades de la medida adoptada se encuentra la de ayudar a equilibrar los ingresos presupuestados para el ejercicio fiscal de 2012 y ampliar la base inpositiva para ejercicios posteriores. "Tenemos una base impositiva muy pequeña para el PIB que tenemos", ha sentenciado en su primera intervención. En estos momentos continúa el debate con la intervención de los grupos de la oposición en una sesión que se prevé larga. Al inicio, más de una docena de cámaras de televisión, otros tantos fotógrafos y numerosos periodistas se han agolpado a la entrada de la sala donde se desarrolla el debate. 
Los grupos parlamentarios del PSOE y de La Izquierda Pluralhabían reclamado  las explicaciones de Montoro y su dimisión por las revelaciones sobre Bárcenas.
El PP se encuentra envuelto también en un escándalo por los supuestos sobresueldos en dinero negro que habrían estado cobrando sus dirigentes entre 1989 y 2009.
Montoro, que ha defendido "la transparencia de mis declaraciones" de carácter fiscal, ha dedicado la mayor parte de su segunda intervención a sacar pecho por su gestión, que ha permitido "traer más dinero para que paguen impuestos. Es increíble que cuando uno lo logra se le critique por si beneficia no se a quien. Es increíble, pero difamar sale gratis. No interesa cambiar algunos titulares", ha exclamado en otro momento.
En base a ese argumento ha justificado la conveniencia de la medida fiscal decidida por el Gobierno el pasado año, que calificó una y otra vez como "excepcional y extraordinaria". Y en todo momento esgrimió que de no haberse adoptado el dinero que ha aflorado "no estaría en España para tributar, estaría fuera del control de la administración tributaria. Y eso es importante". 
Los grupos minoritarios se han mostrado defraudados, y muy críticos, tras la primera intervención de Montoro en la comisión. Todos los portavoces, desde formaciones de talante conservador como CiU, PNV y UPyD, hasta las más progresistas, ERC, Amaiur o BNG, han vuelto a denunciar el contenido de la amnistía fiscal, poniendo en duda la tesis del ministro de que no evita la práctica delictiva del blanqueo de dinero, y, sobre todo por los pobres resultados obtenidos en términos de recaudación tributaria con esta medida.
“Montoro, además de recortar el Estado del bienestar, ha recortado también lo que deben pagar los defraudadores” El portavoz vasco, Pedro Azpiazu, ha añadido: "Ha sido una amnistía fiscal en toda regla. Y si usted ha dado un titular, le ofrezco otro, mucho ruido y pocas nueces, señor ministro. Al final, nos ha dejado a todos fríos, no ha contado todo lo que sabe”, en referencia al caso Bárcenas. El resto de portavoces no ha tenido frases más complacientes. Rafael Larreina, de Amaiur, ha insistido en que la amnistía fiscal era injusta "y la recaudación que ha ofrecido lo confirma". Este portavoz también ha ofrecido otro titular: "Montoro, además de recortar el Estado del bienestar, ha recortado también lo que deben pagar los defraudadores". Tanto Sánchez Llibre, de CiU, como Bosch, ERC, se han manifestado en similares términos, siempre críticos.
Por su parte, la portavoz del grupo popular, Ana María Madrazo, ha utilizado su intervención para arremeter contra el grupo socialista, el PSOE y su portavoz esta mañana, Pedro Saura. "El único partido condenado por corrupción ha sido el suyo", espetó dirigiéndose a la bancada socialista. Y ha añadido: "Lo único que les interesa a ustedes es envenenar y empozoñar la vida política". El resto de su intervención la ha dedicado a defender la intervención del ministro, sin citar a Bárcenas.

Una entrevista a tumba abierta con Laureano Oubiña publicada hace 2 años

Oubiña: "Yo financié los partidos de Fraga y Suárez"


 David López -Vanity Fair


 Laureano Oubiña (Cambados, 1946) lleva en la cárcel 10 años por tres delitos de tráfico de hachís. Pero todo comenzó oficialmente una década antes, en 1990, cuando el 12 de junio el juez Baltasar Garzón ordenó la famosa operación NécoraSito Miñanco y Manuel Charlín. Los capos de un negocio que movía más de 2.000 millones de euros al año a finales de los ochenta y que dejó en Galicia una legión de toxicómanos que hoy se conoce como “la generación perdida”.

Fruto de aquella operación Oubiña sólo resultó culpable de un delito fiscal —de hecho hasta 1999 no fue condenado por contrabando de hachís por primera vez—. Pero desde entonces tanto su figura contundente y su frondosa barba, como su Pazo de Bayón, en Vilanova de Arousa, Pontevedra, ante el que se manifestaban las agrupaciones de madres contra la droga, son la imagen del enemigo público número uno en la lucha contra el narcotráfico.
Imagen del artículo De aquel pazo —decomisado por el Estado y vendido en 2008 a las bodegas Conde de Albarei— salió el pasado 6 de noviembre el vino Albariño con el que los príncipes de Asturias brindaron en Santiago de Compostela por la visita del Papa. Al mismo tiempo que su antiguo dueño almorzaba en el comedor de la prisión salmantina de Topas y sólo un par de días después de que contactase con Vanity Fair, contestando así a nuestra solicitud de entrevista.
Oubiña acepta responder por escrito un amplio cuestionario con la condición de que se incluyan preguntas sobre su situación penitenciaria actual, que, según denuncia, es injusta.
Su caso continúa abierto, y pocos días antes de cerrarse el reportaje, lo trasladan (ha pasado ya por una decena de centros) a la prisión de Villabona, en Asturias. Un cambio que, según explica a través de su hija Esther —que ejerce de portavoz y lo ha convertido en el único preso con un sitio web (laureanooubiña.es) y una página de Facebook donde cuenta con 63 amigos que se interesan por su actualidad— "el médico de la cárcel desaconsejaba porque sufre dos hernias discales y tenía pendiente una revisión en el hospital desde hace cinco años".
— ¿Qué será lo primero que haga cuando salga? ¿Dónde tiene planeado vivir y a qué piensa dedicarse?
— Estar con mis hijas, Esther y Lara, y defenderlas de las tropelías que les ha hecho la Audiencia Nacional. Tengo pensado vivir donde he vivido desde principios de 1984, en La Lage (Vilagarcía de Arosa, Pontevedra). Y me dedicaré a trabajar honradamente y, cuando no tenga salud, a vivir de mi pensión, que para eso he cotizado como cualquier hijo de vecino.
— Ha sido condenado por traficar con hachís. ¿Nunca pensó en hacerlo con otras sustancias? ¿Qué diferencia había?
— Jamás. Si he traficado en alguna ocasión con hachís es porque nunca se me pasó por la cabeza que llegásemos a estas fechas sin que estuviese legalizado, tanto en España como en el resto del mundo. La diferencia entre el hachís y otras sustancias es que es una droga blanda, y que yo sepa nadie se ha muerto por consumirlo. Esto que digo lo reconoció el Tribunal Supremo en diversos dictámenes y sentencias. Pero he de dejar constancia de que no me han dejado los tribunales rebatir las pruebas utilizadas contra mí por la acusación y los resultados de las mismas obtenidos con violación de mis derechos fundamentales.
— ¿Tuvo algún tipo de límite ético o barrera moral?
— Por supuesto que sí.
— ¿Hubo algo que sabía que nunca llegaría a hacer?
— Por supuesto que sí: no robar, no violar, no matar, no mentir, no engañar a nadie, ni traficar con drogas que realmente puedan causar daños irreparables en la salud.
— ¿En algún momento pensó en dejar el contrabando?
— Muchas veces, cuando contrabandeaba con tabaco y con café. Pero no lo dejé, en algunas ocasiones por necesidad y en otras por estar enganchado. Espero que el Estado me rehabilite como lo hace con los drogadictos, porque esto de ser contrabandista no deja de ser una droga como otra cualquiera.
— Si volviera atrás, ¿se dedicaría a lo mismo?
— Si volviese atrás, no tuviese necesidad y pudiese llevar una vida normal trabajando honradamente para vivir y mantener a mi familia, claro que no lo haría.
— Se siente rehabilitado?
— No existe la rehabilitación en las cárceles. Eso es una tomadura de pelo. Y quien diga que está rehabilitado miente como un bellaco. Con esas mentiras de que existe la rehabilitación las autoridades penitenciarias justifican los 90.000 euros por preso al año que se meten en el bolsillo. A los políticos de turno, sean del signo que sean, lo que les interesa cuando están gobernando es que haya cada vez más presos, para hacer contratos de cárceles nuevas y que caigan muchos 90.000 euros por preso. Como me decía siempre mi abuela: “¡Ay fillo meu, ti maneja diñeiro sea teu o sea ajeno, que ao manejar o diñeiro aljo entre as unllas sempre che ha de quedar!”.
— ¿Qué le han dicho sus hijas con el paso de los años? ¿Y usted a ellas?
— Mis hijas nunca me han dicho nada. Y yo a ellas les he dado pocas explicaciones. Por desgracia lo han vivido siendo menores de edad y lo han padecido, lo han pagado y lo siguen pagando. Y han sido vapuleadas simplemente por ser mis hijas.
— ¿En qué les dijo que trabajaba?
— No siempre he trabajado como contrabandista de café, tabaco y, en los últimos años, de hachís. Y no me he dedicado exclusivamente a contrabandear, ya que he tenido negocios legales, y he cotizado a la Seguridad Social. No se me caen los anillos por volver a desarrollar este tipo de oficios, ya que sé dirigirlos y llevarlos perfectamente. A día de hoy tengo mi licencia y carné de transportista actualizados. Cuando usted quiera le doy clases de cómo se lleva un camión o la gerencia de cualquiera de las empresas en las que he trabajado.
— ¿Alguien de su familia se había dedicado previamente al estraperlo o al contrabando?
— Sí, mi difunto padre, con el famoso estraperlo de combustible, maíz, aceite, garbanzos, jabón y, por supuesto, de café. Hablo de la época de la posguerra, cuando había mucha hambre y mucha miseria en España. En el ultramarinos de mis padres se repartía la cartilla de racionamiento y muchas veces también se contrabandeaba con esos productos. Al igual mi padre lo hacía mucha más gente.
— Cómo se pasa del estraperlo de gasoil al contrabando de toneladas de hachís?
— No pasé del contrabando de gasoil al de hachís. Era de gasoil y café al mismo tiempo. Luego pasé al tabaco y, posteriormente, cuando las cosas se empezaron a poner muy crudas para el tabaco y su penalización era la misma que la del hachís, fue cuando transporté hachís y me cogieron. Pero me gustaría resaltar, y que quede muy claro para siempre, que yo nunca compré ni vendí un solo gramo de hachís. En alguna de las tres operaciones frustradas por las que fui condenado simplemente lo transporté por mar y tierra, de Marruecos a la Península, y una vez ahí tenía pensado llevarlo en camiones para Holanda, Alemania e Inglaterra.
— ¿Nadie en su familia o amigos intentó frenarlo entonces?
— Por supuesto que sí. Al principio quiso hacerlo mi difunta mujer, Esther. Tuvimos nuestros más y nuestros menos por dedicarme al tráfico de hachís, hasta que conseguí convencerla de que no era una droga que causara un grave daño a la salud.
— ¿Quién se beneficia del narcotráfico, aparte de las mafias que lo controlan?
— Hablar de mafias aquí es decir tonterías. Aquí no existen. Son organizaciones que se dedican al narcotráfico. Mafias existen en otros países, como México o Italia. En cierta medida se benefician los políticos que manejan a las fuerzas represoras. En los años 1985 y 1986 cierto astillero de Vigo construyó una partida de lanchas para la Guardia Civil y Aduanas, donde a mí me habían hecho una embarcación anteriormente. Resulta que la mía había costado 70 millones de pesetas, siendo más potente, y las suyas 315 millones, cuando no llegaban a valer realmente ni 65. Esto lo conté en el juicio de la operación Nécora, se llevó al Parlamento y se debatió. Pero esa diferencia de dinero se esfumó. Habrá que preguntarle al señor Roldán [ex director de la Guardia Civil], y posiblemente al entonces coronel Ayuso [ex jefe del Servicio Fiscal de la Guardia Civil]. Ellos son los que se beneficiaban de la compra de armamento, embarcaciones y todos los equipos para la represión del narcotráfico. E igualmente los políticos de turno.
— ¿Siente que está en deuda con la sociedad española?
— No. Estoy terminando de cumplir mis condenas y no le debo absolutamente nada a nadie.
— ¿Cómo afrontaron las autoridades el problema de las drogas durante los años ochenta?
— Totalmente al contrario de como deberían haberlo hecho: con premeditación, alevosía y posible nocturnidad. Los políticos de turno lo llevaron todo a su interés personal. Cuando vivimos la transición de la dictadura a la democracia, sabían lo que se nos venía encima con el tema de las drogas, y no dieron ningún tipo de enseñanza sobre su consumo. Por eso murió tanta juventud. Esos muertos habría que cargárselos a los mismos del GAL, que no movieron ni un dedo ni educaron. Para cubrir su incompetencia se dedicaron a manejar y teledirigir a las madres contra la droga. Las dirigían contra el narcotráfico para cubrirse ellos por lo que no habían hecho antes. Les pagaban autobuses, hostales y comidas para desplazarlas a las manifestaciones, porque era políticamente correcto y daba votos.
— Fue usted uno de los capos de la droga en España?
— Los tres viajes que se me imputan y por los que me condenaron fueron abortados por la policía, y si no lo hubieran sido yo habría cobrado sólo por el transporte, no por vender ni un solo gramo de hachís. Yo no soy capo de nada.
— ¿Sobornó usted a políticos o miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado?
— Jamás he sobornado ni a unos ni a otros. Pero a finales de los años setenta, cuando pasamos a la democracia que dicen que vivimos, ayudé a financiar a Alianza Popular, del señor Fraga, y a UCD, del señor Suárez. E igual que yo lo hicieron muchos empresarios más que estábamos metidos en el contrabando de tabaco. Por cierto, desde aquí les recuerdo a esos políticos que yo sigo siendo la misma persona que era entonces.
— ¿Qué relación tenía con aquellos a los que también se ha llamado los capos gallegos de la droga, como Charlín o Sito Miñanco? ¿Tenían contacto entre ustedes? ¿Formaban algún tipo de asociación o establecieron algún pacto de no agresión o incluso de cooperación?
— No he tenido relación ni pacto de ningún tipo con estas personas que me menciona. Con alguno de ellos hace mucho que no me hablo, desde los años del contrabando de tabaco, y con otros no he tenido ningún trato, los conozco del pueblo.
— ¿Tenían el mercado repartido según la sustancia con la que trabajase cada uno?
— No sé a qué se dedicaban otras personas. Yo lo único que hacía era el transporte de hachís desde Marruecos a Europa. Viajes que fueron abortados. Pero ni sé, ni quiero saber ni me interesa a qué se dedicaba el resto de personas.
"Imagen del artículo
Una foto del Pazo de Bayón
— Cuando acudió al entierro de su esposa [Esther Lago, fallecida en un accidente de tráfico en 2001] los vecinos de Vilagarcía le llamaban “asesino”. ¿Qué sintió en aquel momento?
— Sentí mucha impotencia y mucha rabia por ciertos vecinos, que no fueron todos, que me tildaron de asesino. Eran madres contra la droga. Yo nunca he sido un asesino ni jamás lo seré, porque nunca se me pasó por la cabeza matar a nadie. Me han cogido como cabeza de turco simplemente por ser gerente de las Bodegas del Pazo de Bayón. Y me gustaría añadir que en caso de que yo fuese narcotraficante de otras sustancias nadie obliga a nadie a que consuma drogas. Y creo que nadie merece que el día del entierro de un ser querido hagan lo que hicieron esas madres.
— ¿Cómo ha sido su vida en prisión?
— Me han tratado y lo siguen haciendo peor que a ningún terrorista del mundo entero, como al peor asesino y violador. Algún terrorista me ha llegado a decir que a mí me han tratado peor que a los miembros de ETA. Donde peor lo hicieron fue en el centro de Zuera (Zaragoza), porque me pegaron. Llevé a juicio a los jefes de servicio y archivaron la denuncia.
— ¿A qué se ha dedicado mientras cumplía la condena? ¿Se ha esforzado por tener una buena conducta?
— Está mal que yo lo diga, pero mi conducta en la cárcel ha sido intachable. De hecho estoy teniendo derecho continuamente a vis a vis extras por hojas meritorias, por mi buen comportamiento y mis trabajos dentro de las prisiones. También estuve matriculado en Derecho por la UNED, pero tuve que dejarlo porque con tantos traslados y cambios no podía seguir el hilo de mis estudios.
— ¿Pensó en algún momento en quitarse la vida?
— Muchísimas veces, sobre todo después de la desgracia de la muerte de mi mujer, Esther, pero al mismo tiempo pensaba que tenía dos hijas menores de edad que estaban solas, huérfanas de madre y con un padre en prisión, y no podía hacerlo. No podía permitirme ese lujo. Y en segundo lugar, no he tenido valor suficiente para hacerlo, porque he tenido siempre miedo a fallar.
— En 1994, tras serle concedida la libertad por la operación Nécora, decía que se dedicaría a cuidar de sus hijas. Tres años después fue detenido por tráfico de hachís. Ahora afirma que hará lo mismo cuando salga. ¿Ha cambiado usted en este tiempo?
— Ha cambiado que voy a cumplir 65 años, por desgracia me he perdido ver crecer a mis hijas y no quisiera perderme también ver crecer a mis futuros nietos. Creo que es una razón más que suficiente para cambiar, siempre que me lo permitan.
—Durante el tiempo que ha estado en prisión, ¿ha dirigido en algún momento su antiguo negocio? ¿Ha podido hacerlo?
— Ni he querido, ni he podido hacerlo, ni se me pasó por la cabeza. Ni negocio ilegal ni legal. Estos años de prisión me he dedicado a defenderme de todas las tropelías judiciales cometidas por la Audiencia Nacional contra mi persona y el resto de mi familia, y seguiré haciéndolo mientras Dios me dé fuerza y salud.
— ¿Se han puesto en contacto con usted de otras organizaciones para trabajar con usted o con sus contactos?
— Jamás, rotundamente no.
— No le gusta que le llamen narcotraficante. ¿Cómo deberían llamarle?
— Lo que no me gusta es que me relacionen con otro tipo de drogas, o que los medios de comunicación jueguen en su noticias con ambigüedades, no detallando qué tipo de narcotraficante soy, para confundir a la sociedad y manipular la información. Yo soy narcotraficante o transportista de hachís, y puede llamarme así quien quiera.
—¿Qué medidas tiene previsto tomar cuando salga?
— Siempre que haya motivo, seguiré querellándome contra los jueces que lo merezcan, aunque sigan archivando las denuncias, ya que hacen corporativismo y se tapan unos a otros. Tengo previsto presentar, por lo menos, cuatro querellas.
— ¿Sigue entre sus planes demandar al Estado por delito contra la salud pública?
— Por supuesto que sí. El Estado está cobrando unos impuestos del tabaco y del alcohol, y ambas cosas no dejan de ser una droga. Incluso lo denunciaré por cobrar impuestos por la venta de vehículos cada día más potentes, con los que se puede conducir a más velocidad de la que está permitido por ley. Coches en los que mueren, por desgracia, muchísimas personas al año. Y, sin embargo, el Estado se aprovecha de los beneficios de la venta de esos coches. Para mí el narcotraficante más grande es el propio Estado, porque sí puede beneficiarse de los bienes que incauta a los narcotraficantes, pero los narcotraficantes no. Explíquenmelo...
— ¿De qué se arrepiente?
— De haber invertido en España el dinero que gané por el mundo con el contrabando de tabaco, café y gasoil, y el de la venta de mi negocio de transportes de camiones en el año 1983. Parte de ese dinero fue para la compra del pazo, y a pesar de haberlo invertido ahí y quedarme sin él se me metió en la cárcel y se les quitó a mis hijas la herencia de su madre.
— Si retrocediera, ¿qué cambiaría?
— Cambiaría de nacionalidad. No viviría aquí en España. Tajantemente. Tal y como suena.
— ¿Ha consumido drogas? ¿Las ha probado?
— Sí: tabaco, alcohol y café. El tabaco lo dejé. El alcohol también, porque aquí en prisión está prohibido. Y café me tomo alguno de vez en cuando.
— ¿Perdió en algún momento a alguien cercano por las drogas o alguien cercano tuvo problemas con ellas?
— Afortunadamente no he tenido a nadie cercano ni ningún amigo que haya sufrido problemas con drogas ilegales. Pero sí he perdido a muchas personas por problemas con drogas legales, como el alcohol y el tabaco.
— ¿Qué relación tiene con su familia?
— Mi familia son mis hijas Esther y Lara y tengo una relación excelente con ambas.
— ¿Qué diferencia su caso del de Manuel Charlín, que salió de prisión el pasado mes de julio sin apenas repercusión en la opinión pública?
Imagen del artículo — En primer lugar, que desde el principio me tomaron a mí como personaje para el circo mediático-político y político mediático que les interesaba formar. Y en segundo lugar, que yo sepa Charlín no se ha querellado contra ningún juez y yo sí. Y en este país cuando te querellas contra un juez te querellas contra todos, y desde ese mismo instante te conviertes en el enemigo número uno. Los jueces y los gobernantes de turno son los que mueven los hilos, especialmente en esa Audiencia Nacional que está totalmente politizada, desde el tejado hasta los sótanos de los calabozos.
— ¿Qué opinan los responsables de la cárcel de Topas?
— Los pobres están asustados y no se atreven a hablar, porque si lo hacen la Dirección General de Instituciones Penitenciarias les corta los atributos. Saben que me sobra razón y que tengo cumplidas mis condenas desde el pasado 1 de julio.
— ¿Por qué los abogados no denuncian las irregularidades que dice que se producen en la Audiencia?
— Si los abogados que trabajan allí hicieran públicas todas las tropelías que suceden, todas esas injusticias no existirían. Lo que pasa es que la gran mayoría no denuncia porque no le interesa. Cuantas más tropelías cometa, más recursos tiene que hacer y más minutas cobra.
— ¿A qué atribuye que la Audiencia Nacional haya rechazado la sentencia a su favor del Supremo?
— A que en esa Audiencia para mí no se imparte justicia, sino odio, rencor y venganza. Y eso viene por intentar defenderme en los juicios y haberme querellado contra los jueces. Verme muerto sería la alegría más grande que se llevarían los componentes de la Audiencia Nacional, ya que son unos terroristas judiciales. Si tenía alguna duda respecto a la sentencia del Supremo, debía haber pedido una aclaración a este tribunal, y no lo ha hecho para no aplicarme todo el tiempo que me correspondía, para entorpecer y retrasar mi salida de prisión. Es inaudito y aberrante. El señor [Javier] Gómez Bermúdez, desde el juicio del 11-M, se cree una estrella y el ombligo del mundo. Y estrellas en la Audiencia Nacional ya ha habido alguna que se ha estrellado y apagado... A su lado Garzón era un santo. Y lo digo con todo el conocimiento de causa.
— ¿Quién era Oubiña y quién es hoy?
— Ahora soy un viejo de casi 65 años. He pasado y he perdido más de media vida aquí en la cárcel, y si antes no era nadie ahora lo soy aún menos. 
Del Pazo al Pozo
“Este pazo se ha convertido en el símbolo de la justicia social y de los abanderados de la batalla contra la droga”. Así oficializó en 2008 el Gobierno la venta del impresionante Pazo de Bayón, con 22 hectáreas de viñedos, a la bodega Conde de Albarei por 15 millones de euros. Cerraba así un proceso que abrió el juez Garzón en 1995 cuando ordenó su intervención y que continuó en 2002 con su decomiso. Sin embargo, el caso sigue abierto, porque las herederas de Esther Lago, fallecida en 2001, reclaman la mitad que correspondía a su madre y que no podía ser decomisada porque con su muerte se extinguió su responsabilidad penal. La denuncia está en manos del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Y la familia anuncia que si es necesario volverá a recurrir hasta el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, al que ya acudió pero que rechazó su demanda porque aún no habían agotado la vía judicial en España.
Su Guerra Contra la Justicia
Desde que hace ya seis años Oubiña se querellase contra siete de sus jueces por supuesta prevaricación (las denuncias fueron archivadas) mantiene un frente abierto con la Audiencia Nacional. “Nos están humillando hasta límites inimaginables. Quieren que cumpla toda la condena, y él no es ni mejor ni peor que cualquier otro preso”, denuncia uno de sus abogados, Joaquín Ruiz-Giménez. El pasado mes de abril, el Supremo dio la razón a Oubiña en una demanda, según la cual, tras la refundición de sus penas, y con el descuento del tiempo de prisión preventiva extra cumplida, su salida debía haberse producido ya. Sin embargo, hasta el pasado 15 de noviembre la Audiencia no aceptó el cálculo de su condena elaborado en la cárcel, según el cual Oubiña, que lleva preso desde noviembre de 2000, completaría totalmente su pena en julio de 2012, aunque habría sobrepasado las tres cuartas partes —límite para poder obtener la libertad condicional— en febrero de 2008. De ahí que sus abogados vayan a solicitar de nuevo a finales de diciembre el tercer grado, aunque anuncian que volverán a recurrir al Supremo. Según explican, “el cálculo no es correcto porque figura que comenzó a cumplir la condena firme en 2003 y no en 2001, como realmente sucedió. Si no recurrimos claudicaremos y aceptaremos la consumación de un retraso injusto en su la liberación”.
"Imagen del artículo

Un nuevo blog de un joven periodista que quiere seguir los pasos de Enrique Meneses

ESCRIBIR UN BLOG

Carlos Vidueira
el periodismo con mayúsculas. Hacía tiempo que quería escribir uno. El empujón definitivo lo tuve escuchando entrevistas de Enrique Meneses. Para los que no lo sepan, Enrique Meneses ha sido un maestro para todo aquel que de verdad tenga vocación por
Mi fotoEl pasado día de Reyes se olvidaba de respirar ese oxígeno que lo tenía unido a este lado de la vida, Enrique Meneses Miniaty. Se fue dejando un curriculum vital y profesional ingente. Una pasión por la vida y por la profesión que amaba, que lo llevó a ser el primero en fotografiar a Fidel Castro y a sus barbudos en Sierra Maestra, a atravesar Africa desde El Cairo a El Cabo buscando historias amor y aventura, a contar la lucha por los derechos civiles de los negros y el gran sueño de Martin Luther King, además de haber sido reportero en las guerras de Rodesia, Angola, Bangladesh, Yugoslavia… y un sinfín de reportajes, tinta  y alcohol durante sesenta y tres años de profesión, de los cuales solo dos estuvo en plantilla... 
Escribió todos los días desde los diecisiete años, y las nuevas tecnologías le fascinaban. Recomendaba tener un blog a todo aquel que tuviera un mínimo interés por el periodismo: “Escribir un blog es vuestro mejor curriculum”, además de ser una fascinante ventana abierta al mundo. 
Yo no tengo la millonésima parte de la vocación periodística que tuvo Enrique Meneses, de otra forma estoy seguro que hubiera hecho exactamente lo que él hizo: largarse a contar las cosas donde quiera que ocurrieran. Sin embargo, en todos estos años no he encontrado una profesión que sienta tan cercana como la de periodista. No puedo obviar el hecho de que leo al menos tres periódicos todos los días, y de que me apasiona la actualidad, que me apasiona contar cosas…
Desde hoy este será el canal para poder contar esas “cosas” a mi manera, y para seguir sintiéndome periodista, ya que las circunstancias, las Causas y los Azares que diría el gran Silvio Rodriguez, me han llevado por otros caminos… y es que "si quieres hacer reír a Dios, cuéntale tus planes".

Enrique Meneses Miniaty. Madrid 1929-Ibídem 2013. D.E.P.

Un artículo de Lucía Etxebarría que circula por la Red



Rajoy es tonto y analfabeto

Por Lucía Etxebarria
Este titular tiene por objeto llamar la atención.
Hace un año escribí un artículo que tenía por título “La infanta Cristina es tonta y analfabeta”. La versión suavizada del artículo no se pudo publicar en ninguna parte. Así que escribí una versión hardcore del artículo y lo colgué en mi perfil de Facebook. El  perfil de Facebook fue desactivado. Más tarde colgué el artículo en una web. Y la web fue hackeada. Pero eso no frenó el avance del texto… el  caso es que el artículo corrió de un lado a otro, vía mail, vía redes sociales, y muchísima gente lo ha leído.
Ojalá pasase lo mismo con este artículo.
Señor Rajoy:
Usted es tonto.
Si le birlan 22 millones (suponemos que bastante más porque esto es la punta del iceberg) y usted ni se entera, es tonto.
Si en su partido corren los sobres de dinero negro como la cocaína en un afterauers y usted ni se entera, usted es tonto.
Si usted ve normal que el marido de Andrea Fabra, elegido A DEDO, eligiera para gestionar los análisis clínicos de la Comunidad a la empresa de la que es consejero, y que cuando, ocupando aún el cargo en la Comunidad, decidiera privatizar esos análisis; si usted ve normal lo del ático en Marbella del señor González, usted es tonto.
Y si usted es tonto, me pregunto cómo va a sacarnos de la crisis.
Ah… que no nos ha sacado.
Ah… que estamos peor que antes.
Ah… que están ustedes cerrando urgencias, privatizando sanidad, denegando becas escolares y echando a gente de su casa.
Ah… que en comparación con usted, Zapatero empieza a caernos hasta bien.
Señor Rajoy, los del partido partido rival de usted tampoco son muy listos que digamos. Que en Andalucía también van perdiendo dinero como locos. Que sí, que lo sabemos.
Lo que yo no puedo entender es que una señora que hasta ahora ha estado casada con un ministro al que ha elegido usted, una señora que trabaja para una televisión controlada por usted, una señora, pues, afín a su partido (a Edurne Iriarte me refiero), me venga poco menos que a soltar ayer que lo que pasa en su partido no es para tanto porque al fin y al cabo el PSOE ha hecho lo mismo con los ERES. Y que, a su lado, otro tertuliano también afín a su partido tuviera la desfachatez de venir a decir que aquí en España quien más quien menos casi todo el mundo es corrupto y que eso es una cosa de la idiosincrasia del país.
Idioticracia, más bien.
Señor Rajoy: cada vez que alguien de su partido me viene a hablar de los ERES de Andalucía para justificar lo que pasa en su partido lo que me viene a decir es que aquí en España la corrupción es la norma, no la excepción, y que entonces nos tenemos que apoquinar con lo que hay. Que no podemos tener sanidad, becas escolares de comedor, urgencias rurales etc… porque aquí robar dinero es lo normal.
¿Usted se imagina que la defensa de José Bretón se argumentara en que también asesinaron a Marta del Castillo y a sus asesinos no les ha venido a pasar casi nada?
Señor Rajoy: A mí no me vale que la señora Cospedal me diga que en el PP “quien la hace la paga”.
No me lo creo.
Repito: No me lo creo.
Mentira podrida.
Le recuerdo que en el PP se indulta a los corruptos.
Han indultado ustedes a Tomás Gomez Arrabal, exalcalde de la localidad malagueta de Valle de Abdalajis, condenado por corrupción, y con él a tres concejales condenados por delitos continuados de prevaricacion. Los cuatro eran militantes del Partido Popular. Salvaron de la cárcel a: Josep Maria Servitje (exsecretario general del Departamento de Trabajo de la Generalitat) y a Víctor Manuel Lorenzo Acuña (empresario) que desviaron fondos mediante el encargo de informes inútiles. Eso lo hicieron cuando aún eran socios de los convergentes. Indultaron a Constancio Alvarado, exsecretario de la subdelegación del Gobierno en Cáceres, a José Manuel Sánchez Donoso y a Luis Calle Fernández, que habían sido condenados en 2010 por vender permisos falsos a inmigrantes. Indultaron a Miguel Escudero Arias-Dávila, tras ser condenado por la Audiencia Provincial de Madrid como autor de un delito continuado de falsedad en documento mercantil en concurso con un delito de estafa. Han indultado ustedes a políticos, banqueros y empresarios… Y a cuatro mossos de escuadra condenados por torturas, en una decisión que ha soliviantado de tal forma a los jueces que casi 200 han firmado un documento en el que acusan al Ejecutivo de dinamitar la división de poderes (ahí es ná) con una decisión “abusiva” y “éticamente inasumible”.
En el PP el que la hace no la paga.
Cobra.
Y en negro.
Por si esto no fuera prueba de que en el PP el que la hace no es que la pague, sino que cobra, le recuerdo a usted el escandaloso nombramiento de un hombre de La Caixa para la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo. Sí, la misma sala que acabará juzgando las preferentes, las cláusulas suelo y otros abusos bancarios.
Un autoblindaje del establishment.
Y ¿tengo que recordarle que en 2011 el partido Popular reclamó el archivo de las actuaciones contra Bárcenas en el caso Gurtel?
Y por cierto, no, no me olvido de que cuando gobernaba el PSOE también se indulta a los corruptos, no lo olvido.
Señor Rajoy: De nada sirve legislar si los mismos que legislan garantizan la impunidad de los corruptos.
Pero para rizar el rizo, pretende usted llevar adelante una reforma penal según la cual…
Despojarían  al Juez Instructor de toda competencia, dejando en manos de la Fiscalía todas las diligencias de los sumarios.
¿Qué significa esto?
Pues que el sumario pasa de controlarlo un señor que, en teoría, es independiente, a uno que está regido por el principio de Obediencia Jerárquica, y cuyo jefe supremo es, ¡oh, sorpresa!, el Ministro de Justicia.
Sustituirían el Principio de Legalidad, que preside nuestro Derecho, por el de Oportunidad.
¿Qué significa esto?
La diferencia radica en que el primero, de manera sencilla, obliga a perseguir de oficio todo hecho que revista indicios de criminalidad, mientras que el segundo se basa en la economía de medios, o sea:
Se persigue… si compensa, o si interesa.
Viene a decir que, dependiendo de quién sea el posible imputado y posteriormente procesado y condenado, se investiga, o se deja pasar. Ya se sabe: me debes un favor de los grandes… y ya te lo cobraré.
Todo esto es lo que tiene en mente el Gallardón, pero no por iniciativa propia, no…
Porque estas medidas cuentan con el entusiasta apoyo de la clase política.
Y es que suponen el fin definitivo a sus problemas judiciales.
Es decir, esta reforma penal les viene bien a todos los corruptos: a los del PSOE, a los suyos, a los de CiU y a los que vayan por libre.
Señor Rajoy:
Si usted no se ha enterado de que su partido está corrupto hasta la médula, usted es tonto. Si de verdad me dice que su tesorero puede birlarle cuatro mil millones de pesetas y usted no alberga la más mínima sospecha, es usted muy bobo.
Y sí, me creo lo que dicen ustedes de que en el PSOE tampoco están mucho mejor. Y sí, de verdad, me creo que Pujol tenga cuentas en Suiza, porque si no no se explica de dónde saca pá tanto como destaca su hijo, yo al menos no me explico cómo Oriol y sus hermanos (una nueva versión de Rocco y sus hermanos) son miembros de al menos 73 empresas, y por qué todas ellas están relacionadas de una forma u otra con encargos de la Generalitat…
Me lo creo, de verdad que me lo creo.
Eso es lo peor: que me lo creo.
Pero que el partido de al lado también sea corrupto no hace que el suyo deje de serlo.
Y lo que a mí me queda claro es que usted no está haciendo nada, pero nada, para luchar contra la corrupción, y sí mucho por afianzarla.
Por lo tanto señor Rajoy, usted miente.
Usted no tiene ninguna intención de luchar contra la corrupción.
Le recuerdo a usted que la organización no gubernamental Access Info Europe, que lucha por la transparencia informativa, le preguntó a usted, sí, a usted, señor Rajoy, cuáles eran las medidas que ha adoptado España para luchar contra la corrupción. En realidad se lo preguntó a su antecesor, pero resulta que la pelota le rebotó a usted. Usted la rebotó a su vez al Ministerio de Justicia. Allí, el Supremo sostuvo que los datos solicitados son una forma de pedir explicaciones al Ejecutivo y no una petición de información en sí.
Y Access Info Europe fue condenada por el Tribunal Supremo a pagar 3.000 euros de costas por querer conocer las medidas que ha adoptado España para luchar contra la corrupción.
Señor Rajoy:  España es, precisamente, el único país europeo de más de un millón de habitantes que no tiene una legislación que ponga coto al secretismo de la Administración y abra los archivos de todas las instituciones que reciben fondos públicos.
Y ahora ya no me dirijo al señor Rajoy sino a vosotros que me estáis leyendo.
Esto se puede y se debe acabar.
La crisis en España no es una crisis financiera, es una crisis moral.
Y hemos llegado a un punto en el que esto se debe parar.
Y se puede parar.
Se puede exigir al gobierno del Señor Rajoy o al que venga después que tome medidas para que esto pare.
Medidas simples como:
- Que el indulto, tal y como está concebido, desaparezca. Que el Gobierno tenga que dar explicaciones claras sobre a quién indulta y por qué. Para que deje de ser la puerta por la que se escapan los corruptos.
- Que no se lleve a puerto la Reforma Penal proyectada por Gallardón.
- Que se imponga la transparencia informativa: se deberían facilitar datos de todas las obras públicas que cada ayuntamiento acomete.
- Que se imponga la conservación de documentos.
- Que se imponga la prohibición de aceptar regalos.
- Que se imponga que cualquier compra que realicen las Administraciones Públicas debería estar ejecutada a precios de mercado e incluir, necesariamente, al menos tres ofertas de proveedores diferentes, para poder elegir la más adecuada.
- Que se imponga la transparencia total de las Administraciones Públicas: que cualquier decisión tomada por un funcionario dentro del cumplimiento de su profesión pueda ser conocida por el resto de ciudadanos, excepto por cuestiones relacionadas con la seguridad. Y así, ningún miembro de la Administración podría negarse a satisfacer las necesidades de información no sólo de los periodistas, sino de los votantes.
- Que se imponga la ausencia de cargos de designación política: actualmente en todo el territorio nacional existe un elevado número de cargos cuya designación ha sido realizada sin ningún criterio de méritos. La hermana de Esperanza, el marido de la Fabra (sí, ese que siendo Consejero de Sanidad nombrado a dedo privatiza los análisis clínicos y luego consigue que sea su empresa la que se lleve la millonaria concesión de esos análisis), etc, etc. La guinda del pastel la pone una alcaldesa que no ha sido votada.
- Que se impongan las pruebas objetivas: para cubrir el lugar de los altos cargos de las Administraciones Públicas deberían realizarse pruebas objetivas, en lugar de ser por designación partitocrática. Estos  cargos deberían designarse por méritos propios, nunca por “soy pariente de, novia de, amante de, prima de, la hermana de…”.
- Que la remuneración de los sueldos públicos sea homogénea: no es lógico que un concejal en Alcalá de Henares pueda cobrar diez veces más que uno en Pontevedra, por ejemplo. Y debería ligarse a factores económicos medibles con el índice de precios de consumo (IPC).
- Que se imponga la homogeneidad de sueldos: los políticos no deberían jamás poder decidir sus propios sueldos.
- Que se imponga la incompatibilidad del cargo público con el ejercicio de actividades privadas relacionadas directamente con los asuntos en que tenga que intervenir por razón de su cargo.
Es decir,
Un político no debería, por ley:
- pertenecer a consejos de administración u órganos rectores de empresas cuya actividad esté relacionada con las que gestione el ayuntamiento;
- desempeñar cargo representativo o ejecutivo en sociedades concesionarias, contratistas de obras, servicios o suministros, arrendatarias o administradoras de monopolios o con participación o aval del sector público local;
- tener participación superior al 10 por ciento en el capital de dichas empresas.
Y ya de paso, acabe usted con la amnistía fiscal. Si esa amnistía consiguió recaudar 85 millones de euros y diez eran de Bárcenas, es como para creer que hizo usted la ley a medida de su tesorero.
Y por supuesto. Que los delitos de corrupción NO PRESCRIBAN, para que su (ex) amigo Bárcenas no pueda irse de rositas.
Tan simple como esto. 
Se puede y se debe exigir.
¿Y cómo puede exigirse?
Acabando con la ignorancia.
«No es una crisis, es una estafa», oímos decir desde hace meses.
Es una historia de robo, de complicidad, de sumisión, de ignorancia generalizada y de maniobras de distracción.
Cuando los valores morales en una sociedad son la codicia desaforada, el consumismo, la frivolidad, el sensacionalismo, el culto a la apariencia, el culto al cuerpo, el yo-mí-me-conmigo, el hedonismo, el solipsismo, el egoísmo, el ni-lo-sé-ni-me importa, el no-leo-periódicos-porque-me-aburro-y-yo-sólo-leo-el-cuore, porque la frivolidad-es muy-moderna; cuando cada uno barre para casa y únicamente mira por lo suyo y le interesa menos que cero el bien común; cuando a los corruptos no sólo no se les condena sino que se les premia y se les admira y se les vuelve a votar; cuando las palabras ética y moral se pasan de moda, antes o después el sistema cae, como ha quedado demostrado. Y se polariza: los ricos se hacen mucho más ricos; y los pobres, más pobres.
Pero hemos llegado a un punto en el que la única manera de salir adelante es desde la información y la exigencia.
Información es conocimiento, conocimiento es sabiduría, sabiduría es poder.
Todos podemos salir a la calle a exigir una Ley de Tranparencia y una Ley Anticorrupción serias. Y ha llegado el momento de hacerlo.